Franz Beckenbauer fue sepultado este viernes 12 de enero de 2024 en el cementerio de Perlacher Forst en Múnich.

La ceremonia, de carácter familiar, contó con la presencia de su viuda Heidi y sus hijos Thomas, Michael, Joel y Francesca, quienes acompañaron el ataúd del campeón del mundo como jugador en 1974 y como entrenador en 1990. Este camposanto alberga también los restos de su hijo Stephan y sus padres.

A pesar de la naturaleza privada del evento, algunos reporteros y equipos de televisión asistieron para dar cobertura. Esta tarde (14:30 hora de Ecuador), durante el partido entre el Bayern Múnich y el Hoffenheim, ambos equipos llevarán brazaletes negros y se guardará un minuto de silencio en memoria de Beckenbauer, quien dejó una huella imborrable en el club bávaro donde forjó la parte más destacada de su carrera.

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El 19 de enero, se llevará a cabo un significativo homenaje en la Allianz Arena, evento que será transmitido en vivo. Para aquellos que deseen expresar sus condolencias, se han dispuesto libros en la Residenz y en el ayuntamiento de Múnich en la Marienplatz.

El primer ministro bávaro, Markus Söder, ha anunciado la posibilidad de organizar un acto fúnebre en representación del estado federado de Baviera.

Durante estos días, han surgido diversas propuestas para honrar la memoria de Beckenbauer de manera perdurable. Berti Vogts, exseleccionador, ha sugerido la posibilidad de nombrar la Copa de Alemania en su honor.

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Asimismo, se ha planteado la idea de renombrar la Allianz Arena y designar con el nombre de Beckenbauer alguna plaza o calle de Múnich. Cabe destacar que Beckenbauer, quien había mantenido un perfil bajo en los últimos años, falleció el 7 de enero de 2024 en su residencia en Salzburgo, Austria.

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