Realizar actividad física, tener movimiento corporal es fundamental para mantener bienestar general y un buen estado de salud, de cuerpo y mente. Sirve también para reducir riesgos de depresión y ansiedad.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que al menos se practique entre 60 minutos de jornada deportiva aeróbica moderada al día, ya que la inactividad física es uno de los principales factores de riesgo de mortalidad a nivel mundial.

Por lo beneficioso que es ‘mover el esqueleto’, todas las personas deberían hacer largos desplazamientos a pie, trotar, practicar algún deporte de manera regular, andar en bicicleta u otra actividad recreativa que implique moverse.

Pero muchos vinculan la actividad física con el propósito de bajar kilos o mantener la figura, por eso se involucran en períodos de entrenamiento en los que suelen cometer algunos errores.

Adrián Tobar, nutricionista deportivo, comparte recomendaciones para no fallar en el intento...

1.- PERSONAL.

Las personas suelen adaptarse a alguna planificación de deportistas, pero no todos somos iguales, cada uno de debe tener su plan personalizado tanto en la nutrición como en las jornadas de ejercitación para que tengan buenos resultados.

2.- CONTROL.

Antes de iniciar un plan de jornada física, las personas deben evaluarse para ver sus capacidades; conocer su estado si han tenido lesiones o algunas patologías, como enfermedades cardíacas. No todos pueden ejercitarse en la misma intensidad.

3.- HÁBITO.

Hay que crear una disciplina. Es mejor iniciar un proceso de ejercitación de manera progresiva y tratar de mantenerlo por largo tiempo de tal forma que el cuerpo se acostumbre y el beneficio sea permanente.

4.- DIETAS.

La alimentación debe estar vigilada si practica ejercicios, porque algunas personas también incorporan ciertas dietas que suelen ser muy estrictas. Entre ellas, suprimir los carbohidratos, disminuir proteínas y otros alimentos.

Algunas de estas restricciones tienden a ocasionar un efecto rebote, bajan grasas y también musculatura y recuperar músculo es muy complicado.

Cada persona debe llevar su dieta, según la intensidad de su actividad física, pero no deben dejar de comer.

5.- HIDRATACIÓN.

Tomar agua es fundamental y la cantidad que se beba depende de la actividad física que realicen. Eso es según cada persona.

El nutricionista deportivo Adrián Tobar también aconseja refrescarse con infusiones porque tienen fitoquímicos que ayudan a relajar el cuerpo. Puede ser té de Jamaica. También puede tomar aguas aromáticas tibias por las noches, después de su ejercitación, cuando ya va a descansar. Eso hace bien.

6.- HORA.

Lo ideal es ejercitarse por la mañana, para estar activo, pero muchas personas sueles hacerlo después de sus jornadas de labores y según Tobar, es conveniente hacer ejercicios hasta antes de las 20:00, si practica una actividad aeróbica, por cuanto debe esperar hasta dos horas para ir a dormir.

En cambio, si sus rutinas de ejercicios son más intensas, deberían practicarlas hasta las 18:00, ya que el cuerpo debe reposar unas cinco horas terminado el entrenamiento para ‘meterse al sobre’. Caso contrario estará activo y no podrá conciliar el sueño y eso afectará la salud.