En el último partido entre la selección de Ecuador y la de Panamá hubo un gesto que debiera ser tenido en cuenta en más eventos como una muestra de respaldo a lo ‘Made in Ecuador’: el obsequio de sombreros de paja toquilla o sombrero de Panamá por parte de los nacionales a sus similares canaleros antes del cotejo.

“Es un gesto de los muchachos a los jugadores panameños de hermandad muy bonito”, dijo el estratega, Hernán ‘El Bolillo’ Gómez.

Lo que para muchos puede pasar desapercibido debiera ser replicado en muchas otras circunstancias como política de Estado, entre otras razones, porque dicho elemento es Patrimonio Inmaterial de la Humanidad desde 2012 y, sobre todo, porque es el símbolo de lo ecuatoriano, de lo criollo.

Y es que, por citar un ejemplo, uno de los grandes boxeadores que en su momento tuvo Colombia fue Miguel Lora, El Happy. Una costeño que cada vez que ganaba lo primero que pedía era que le pusieran ‘el sombrero vueltiao’, propio de su cultura caribeña y muy autóctono como lo es el sombrero de paja toquilla.

Es precisamente ese sombrero el que identifica hoy a los colombianos ante el mundo y un símbolo de identidad.

¿Por qué no impulsar gestos emblemáticos como el de ese sombrero? Este y otros elementos más existen en Ecuador y podrían ser los mejores ‘embajadores’. Palabra que sí.

FRASE: “Si quieres ser universal, habla de lo tuyo, de lo local”. (Anónimo)