Es una vieja tradición que el 12 de Octubre, en que en nuestro continente y España se celebra el Día de la Raza, en recordación y homenaje a la llegada de Cristóbal Colón, con sus 3 carabelas, a un nuevo suelo, originando lo que se conoce como el Descubrimiento de América, en 1492, también se festeje a los barrios de la urbe más grande y poblada del Ecuador.

Esta fiesta popular tan tradicional que, lamentablemente, con el tiempo ha ido perdiendo su entusiasmo e importancia, servía y aún sirve para hermanar a la población de los diferentes sectores citadinos con costumbres que convocan a miles de pobladores que, con tal celebración, daban por concluida la semana cívica y festiva que incluía a la independencia de la ciudad el 9, y al Día del Bombero, el 10. Entre estas costumbres tradicionales se cuentan el palo ensebado con atractivos premios en una altura que había que alcanzar con grandes esfuerzos, además la carrera de ensacados y el concurso de los “comilones”.

De todas maneras, la población guayaquileña en esta semana ha salido a las calles para celebrar emocionada las fiestas independentistas y barriales, demostrándose la unidad y el entusiasmo de la comunidad porteña.