La ‘fiebre’ por el rapero puertorriqueño Bad Bunny llegó a Ecuador y así lo demuestran sus fanáticos, quienes en menos de 24 horas agotaron las entradas para el concierto que se realizará en Quito, el próximo 16 de noviembre, en el estadio Olímpico Atahualpa.

Según los organizadores, hasta el momento no se sabe con exactitud la cantidad de boletos vendidos, ya que aún se debe cuadrar el número total con el SRI para el pago de los impuestos respectivos.

Las únicas entradas disponibles son las que van a sortear algunos ‘media partner’ (aliados como medios de comunicación o influencers) en sus redes.

Una de las personas que se quedó sin entrada fue Jordan Zambrano, a quien le parece ‘bacán’ este tipo de conciertos, ya que lo cataloga como “un show de otro nivel”, por el que vale la pena pagar.

“Lamentablemente no pude conseguir entrada. Desde temprano me conecté a la página en donde vendían los pases y era el número 700, pero de un momento a otro se cortó la señal; reinicié la página y me tocó el turno 8 mil. ¡Qué locura!”, recuerda el joven, quien está incursionando en la música.

Pese a todos los intentos, Jordan hizo fila en un local de vía a la Costa desde las 05:00 para ver si conseguía la entrada, sin embargo, no encontró. El reloj marcó las 18:00 y se dio por vencido.

Zambrano se declara un fiel seguidor de Bad Bunny, por eso aún mantiene la esperanza de asistir ese día y verlo.

“Diosito tiene  sus favoritos”

Melanie Ortega encontró un tutorial en TikTok para conseguir sí o sí una entrada para el espectáculo del Conejo Malo. “Decía que debías conectarte desde distintos navegadores. Yo tenía tres computadoras y tres celulares. En unos tenía el turno 60 mil, en otros el 40 mil hasta que en uno era el 3.800. Ahí dije: este es mi lugar, de aquí no me mueven”, explica.

Después de horas de espera, la admiradora del artista logró conseguir cuatro entradas para el evento. Irá con sus ‘panas’.

Pero antes de ‘cantar victoria’ vio a sus colegas fracasar en el intento. “Cuando ya estaban cerca, se agotaron las entradas, a otros se les cayó la conexión de Internet y a algunos no les funcionó la tarjeta de crédito. No hay duda que Diosito tiene a sus favoritos”, menciona.

Sofía Sánchez también sacrificó toda una madrugada para conseguir cinco boletos para el concierto. Es una mamá ‘acolite’ y no podía permitir que su hija, de 20 años, se quedara sin boleto. “Nos conectamos en dos computadoras desde las 23:59 del viernes. Logramos la compra el sábado a las 08:00”, comenta. (AAM/ GCH)