El momento relajado que disfrutaba el dueño de una lubricadora fue interrumpido violentamente por un asaltante. El pillo se acercó para intentar arrebatarle el celular, acto criminal que luego provocó la muerte del emprendedor.

El repudiable hecho ocurrió el jueves 28 de marzo dentro del negocio, ubicado en las calles 11 y Maldonado, en el suroeste de Guayaquil. Previo al atraco, la víctima, Marvin Lindao Peñafiel, estaba en una hamaca viendo su celular. Distracción que aprovechó el delincuente.

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En una filmación de las cámaras de seguridad del establecimiento comercial se observa al implicado acercarse e intentar arrebatarle el teléfono a la fuerza. Después, el propietario del negocio se resiste al robo. Empiezan a forcejear y el malandrín lo golpea en la cabeza en represalia. Siguen en disputa, hasta que el hampón le dispara y se retira, sin lograr arrebatarle el aparato.

El ciudadano baleado gritó de dolor en dos ocasiones. Enseguida clamó desesperado por ayuda. “¡Llévenme al hospital!”, decía desesperado, mientras un trabajador se acerca queriendo auxiliarlo. Vecinos y colaboradores finalmente lo trasladaron a una casa de salud, pero lamentablemente falleció.

Una allegada al emprendedor contó que su pariente recibió un disparo en la parte izquierda del abdomen. Una herida que le hizo perder sangre. A pesar de eso, continuó vivo por aproximadamente una hora más. Pero ya no resistió más tiempo y murió. “El delincuente iba en una moto. Estaba solo, no andaba con nadie”, comentó la mujer, quien junto a otros familiares ayer estaban pendientes de los trámites para retirar el cadáver y velarlo.

El hombre, según vecinos, tenía menos de un año con el negocio en la zona. Lamentaron que por efecto de la delincuencia haya muerto y piden que la Policía localice al desalmado criminal para que sea detenido y pague en ‘cana’ su indolente acto. “Esto es una muestra de lo peligrosa que está la ciudad. Necesitamos que se actúe contra los mañosos, no podemos estar en paz”.

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