Los Premios Disco Rojo, un reconocimiento a la entrega y dedicación de los artistas ecuatorianos, convocaron a reconocidos intérpretes, público invitado y fans que abarrotaron el Teatro Centro de Arte para apoyar a sus cantantes favoritos.

El espectáculo, que se desarrolló la noche del martes 9 de mayo, duró poco más de tres horas y a más de la premiación en 12 diferentes categorías, permitió ver un show de gran calidad de Tres Dedos, Mar Rendón, Dayanara, Andreína Bravo Daniel Páez, el brasileño Rodrigo Massa, Daniel Parra, LaVivi Parra, Jandino, Ren Kai y Fresto, El Tita. Con el gran cierre que le dio el chileno Américo.

La escenografía, las luces y los apoyos visuales en pantalla gigante fueron el complemento adecuado.

El control en la alfombra roja, destinada para el paso de los artistas, quedó un tanto corto, ya que no faltaron los que se metieron para tomar fotos y realizar entrevistas, obstaculizando el paso.

La presencia de los fans de Andreína Bravo y Dayanara fue de las más numerosas, pero también las más escandalosas, porque en el afán de mostrar su apoyo no dejaban escuchar y perturbaron con tanto griterío.

Ni el llamado de silencio de la presentadora Karina Monroy fue escuchado.

Es un teatro, pero hubo algunos que se pararon en los asientos. Son factores externos y de cuestión de educación.

La premiación y el espectáculo fueron de calidad, como dijo Dayanara: “Son nuestros Grammy Latinos”. Hay que valorar la premiación que en cada edición se supera más. 

No obstante, Karina Monroy a ratos olvidaba que se encontraba en una gala de premiación y se extendía en sus comentarios, bromas y hasta cantó, como si estuviera locutando. En el público se escuchó: “yaaaa, rápido”.

Y Dayanara si bien fue muy aplaudida cuando cantó un popurrí con los pasillos Sendas distintas, El alma en los labios y Sombras, cerró con Cuando llora mi guitarra, que es un vals peruano, pero  la incluyó en el mismo grupo y  pidió que siempre se apoye a la música nacional.