Las actrices Juana Guarderas y Elena Torres están ‘locas’ de alegría al regresar a las tablas del Patio de Comedias para una nueva obra de ‘Las Marujas’, un proyecto que tiene más de tres décadas.

Un sentimiento de nostalgia las embarga al recordar a Martha Ormaza, la Marujita Encarna, que murió en 2018, dejando un legado valioso.

“La construcción de ‘Las Marujas’ fue concebida y adaptada para que no siempre estemos todas. Por temas de trabajo, partos, enfermedad lo hacíamos dos o incluso una, solo Elena no ha hecho monólogo”, describe Guarderas, quien da vida al personaje de la cuencana, Abrilia.

Fue en septiembre del año pasado cuando Guarderas y Torres se juntaron por última vez en ese teatro -que desde sus inicios ha sido su ‘cuartel general’- uno de los pocos espacios culturales en Quito que sobrevivió a la pandemia.

Hoy vuelven a escena con la obra ‘Las Marujas, entre taitas, mamas y tereques’. Una vibra muy especial invade el espacio. Allí “se mezclan los recuerdos maravillosos y bellísimos que compartimos con Martha, pero también la nostalgia de echarla en falta”, añade Juana.

Una sólida y profunda amistad se formó tras años de compartir escenario. Incluso Juana acompañó a Ormaza en una cama de la Unidad de Cuidados Intensivos, cuando su partida era próxima.

“Más allá de lo escénico, fue una hermana. Le conversaba y le cantaba. Vino el médico y me pidió que no le haga hablar. Yo le dije: nosotras tenemos otras formas de comunicación, miradas, algo casi telepático”, menciona.

Ya sobre las tablas, Elena, quien interpreta a Cleta, la quiteña, también recuerda los sombreros que usaba Ormaza y la forma en la que juntas iban armando las obras. “Ella usaba ese rojo que fue de la suegra de mi hermana. Yo me ponía los de mi mamá”, menciona. 

El cuarto de lo donado

Desde 1928, la casa en la que hoy se levanta el Patio de Comedias sirvió como centro cultural para los padres de Guarderas. La música, la literatura y la historia cobraron vida en ese espacio, que desde 1980 se transformó en el teatro que hoy es.

El escenario, las butacas, los camerinos y la bodega de vestuario son lugares en los que se concentra la esencia de quienes han contribuido con el espacio.

“Muchas de las cosas para las obras han sido donaciones de tías, abuelas, primas. Una vez nos llegó una caja maravillosa. Era espectacular, una persona nos había donado su colección de sombreros”, revela Juana.

Hace poco, el familiar de una allegada de Juana falleció, por lo que su silla de dentista y todos sus implementos profesionales terminaron en la bodeguita, en la que lejos de sentirse un ambiente pesado, mantiene “buena energía”. Los trajes de Martha también permanecen en ese cuarto de utilería.

PILAS CON ESTO

Los boletos

Una función única en vivo de ‘Las Marujas, entre taitas, mamas y tereques’ será transmitida por las plataformas digitales, este domingo 13 de junio, a las 18:00. Los boletos están disponibles en www.ticketshow.com.ec