Para Álex Altamirano, la situación que atraviesan los artistas es preocupante. La mayoría, asegura, no puede vivir solo del arte en Ecuador.

Por eso se dedican a todo tipo de actividades para generar ingresos. “Sobre todo a la venta de comida. Tengo colegas que preparan humitas, arroz con camarón y cosas así”, describe Altamirano, quien inició su carrera en teatro cuando tenía 16 años.

Eso después de haberse topado con varios colegas que se dedican a un sinfín de ‘chauchas’ para sobrevivir. No es un secreto que haya artistas que comercian miel de abeja, ají, mariscos, incluso hay quienes se han dedicado a conducir uber.

Es por esto que desde la organización Uniarte (Sociedad de Gestión de Artistas y Autores Audiovisuales del Ecuador), se inició una campaña para que los derechos del gremio sean reconocidos.

“Se firma un contrato de transmisión por un número específico de años. Pero hay canales o plataformas que siguen transmitiendo series o programas cuando ya ha caducado sus contratos y ya no tiene derechos de transmisión”, precisa Altamirano.

Esto significa que si alguna cadena de televisión nacional o por cable quiere reprisar series como ‘El Cholito 2’, ‘La Panadería’, ‘Historias Personales’ -algunas de las producciones en las que ha participado el actor- deberá pagarle a él y al resto del elenco las regalías que les corresponden. Pero no lo hacen.

Es ley

En 2016, el Código Orgánico de la Economía Social de los Conocimientos, Creatividad e Innovación reconoció el derecho de remuneración para los artistas.

Pese a que esto ya es ley, la actriz Sonia del Cisne Valdez explica que no se ha cumplido.

Esto fue lo que motivó al colectivo que ella preside a lanzar la campaña ‘Actúa por tus derechos’. A esta se han sumado reconocidos talentos de pantalla como Roberto Manrique, Giovanna Andrade, David Reinoso, Mare Cevallos, Erika Russo y Santiago Carpio.

“Los artistas somos un sector que durante la pandemia ha sido más vulnerable por las restricciones (...) En países como Colombia estos derechos están normalizados”, describe Valdez.

Valdez reconoce que la situación sanitaria ha frenado los planes laborales de los actores. A Sonia, por ejemplo, una temporada teatral ‘se le fue abajo’ por el coronavirus.

Luego, las medidas restrictivas de los fines de semana retrasan la reactivación de este sector. “Asisto a proyectos a los que me llamen. En junio tengo rodaje en Cuenca, pero todos estos son trabajos esporádicos. Uno debe amar mucho la profesión para vivir a la deriva, a la sorpresa...”, finaliza. 

Afectados

Esta situación afecta a actores, guionistas, productores, artistas visuales y demás miembros del gremio.