Los sueños se cumplen con trabajo, sacrificio y en silencio. Y Ángel Gracia, ahora jugador de Emelec, lo hizo por una década de manera callada y este año, en solo cinco días vio reflejada su labor.

En menos de una semana estuvo en la entrega de los premios de LigaPro, donde estaba nominado a mejor lateral zurdo, luego fue titular con el Bombillo en la goleada al Deportivo Cuenca, y en ese partido se mandó dos asistencias de gol para el segundo y tercer gol.

Y si eso parece poco estuvo en el microciclo con la Tricolor de Gustavo Alfaro. ¿Se puede pedir más?

ORGULLO DE PAPÁ

Su padre Julio Gracia ha sido uno de los motores en su carrera futbolística desde cuando se fue a probar a Fedeguayas (2009), Panamá (2010) o cuando estuvo en la frontera con Perú en el Huaquillas FC, en el 2012. Ángel recuerda sus palabras cuando le decía que no pare, que ya vendrá el equipo grande.

“Mi papá siempre me apoyó, me decía que no me detenga. Ahora que vivo una etapa increíble me doy cuenta que él tenía la razón”, expresa Gracia, quien por ahora le debe la camiseta número 19 con la que juega en el Bombillo.

Cuando llegó a Guayaquil City en el 2020, la familia estaba feliz y sabía que el salto a un equipo grande estaba más cerca. “Mi familia está siempre contenta, el avanzar en mi carrera es bueno y solo estoy agradecido con Dios por este regalo que me ha dado de llegar a Emelec”.

Sobre el pedido de camisetas de sus seres queridos, el jugador explica: “A mi papi tengo que darle la camiseta, él siempre me decía que trabaje fuerte para llegar a un equipo grande. Claro que el sueño de él era estar en Emelec, porque es un emelecista de toda la vida”.

El papá de Ángel irradia de felicidad al ver que su hijo viste de azul.

“Él está feliz y yo también. Me dijo que algún día se iba a dar este momento y que ahora tengo que aprovecharlo para quedarme por mucho tiempo”, señala el defensa azul.

PROMESA AZUL

El lateral del Bombillo es práctico en señalar lo que puede dar en el 2021. “Prometo sacrificio, entrega, voluntad y compañerismo en el equipo”. Lo dice con sencillez.

Su llamado al microciclo con la Tricolor lo soñaba, sabía que lo que mostró en Guayaquil City y ahora en Emelec sería el salto que necesitaba para ser tomado en cuenta en la Tri. 

Ahora se ha puesto como meta no parar para seguir siendo llamado.

TIROS LIBRES

Además de defender, Gracia es el dueño de los tiros libres. Eso pasó con el Guayaquil City y se vio en el partido de Emelec ante el Cuenca.

“Mi objetivo es asistir a los compañeros que estén mejor ubicados”, explica. ¡Y vaya que le ha ido bien! Fue el mejor asistidor de la primera fecha de LigaPro con dos actuaciones que terminaron con goles y fue nombrado en el 11 ideal de la fecha. Recuerda que la forma de pegarle en los tiros libres es herencia de su exentrenador Janio Pinto, un crack que llegó al Ecuador en la década de los 80 y jugaba de 10.

Por ahora, a sus 31 años, quiere ser pieza clave del Emelec de Ismael Rescalvo, que hacer soñar a su hinchada. Gracia es otro ejemplo de que los sueños se cumplen en una cancha.