“Lo que no fue en tu año, no te hace daño”, reza un dicho popular, el cual significa que se relaje por el pasado de su pareja y siga con su relación actual.

Sin embargo, hay quienes no pueden hacerlo y se atacan si su enamorado (a) sigue en contacto con su ex; o lo que es peor, le tiene celos, aunque esta haya desaparecido de la vida de su querido (a).

Quienes actúan así son individuos inseguros, indica la psicóloga clínica Wendy Lara, quien sostiene que esta persona podría exigirle al otro que no siga a su ex en redes sociales, podría revisar el celular de su pareja, trataría de controlar sus amistades, prohibiría sus salidas, etcétera.

Según la psicóloga Verónica Fonseca, un inseguro no habría sanado sus emociones, ni trabajado en sus pérdidas, no ha superado frustraciones, heridas, adicciones, codependencias, traumas a tiempo, tomará cualquier excusa para instalar su “control” demandante y cuestionador. Vive en un constante tormento interno.

“Cuando un ser no tiene identidad, adoptará manías y una de ellas son los celos, con su clásico argumento: ‘porque te amo’, pero solo son conflictos internos no resueltos”, explica la experta.

Estrategias y efectos

Fonseca señala que quien cela realizaría conductas bloqueo: crea ambientes para que la pareja se aísle de su familia y amigos. Que viva, respire y dependa solo de él o ella, sin lugar a opinar, que no trabaje ni se desarrolle, para quien cela, él es suficiente.

Lara dice que cuando existen los celos se puede llegar a la violencia intrafamiliar, padecer de agresión física, psicológica o sexual. No olviden, el diálogo siempre es la vía.

¡De ‘pelado’ es todo!

“Por sentido natural de supervivencia, el hombre o mujer desde su infancia dice: “mío, mío” y es entendible porque se está formando y explorando sus emociones: rabia, enojo, ansiedad, tristeza y es responsabilidad de los padres ayudarlo a desapegarse armoniosamente de las cosas para que en la adultez no tenga problemas con este tipo de comportamientos o tenga perfil celópata”, precisa Fonseca. 

EXTRAtips

1. Reconoce que tienes un problema. Es importante aceptarlo para poder superarlo.

2. Lo peor, callar. Hacerlo daña a la persona, la llena de ansiedad y le puede hacer vivir episodios depresivos, incluso pueden dar por terminada la relación. Por eso, primero conversen tranquilamente lo que están sintiendo, sin gritos ni reclamos. Dile lo que te molesta, qué actitudes. También permite que el otro te dé las explicaciones de lo que no te ‘cuadra’.

3. El terapeuta los puede ayudar. Si no pueden canalizar, y resolver este tipo de conflictos, vayan a terapia individual y en pareja. Él les puede hacer ver si los celos son infundados o no y les dará herramientas para llevar una relación en paz.

4. Trabaja en tu autoestima. Construye la confianza en ti mismo, recuerda quién eres y lo que vales. Nunca te compares con otra persona, eres único (a). Para que tu pareja te respete, hazlo tú primero.

5. No saques los ‘cueros al sol’ digitalmente. Si quieres desahogarte por este tema, busca a tus amigos más cercanos, sensatos y prudentes; a tu familia, pero no te ‘destapes’ en redes sociales destrozando a tu pareja y a su ex. Date tu lugar.