Retomar la relación sexual luego de mucho tiempo de no haber tenido pareja puede ocasionar tanto en el hombre como en la mujer muchos temores que podrían ser infundados. Como, por ejemplo, el hecho de haber perdido la práctica, no desenvolverse bien, mostrar la desnudez de su cuerpo, no cumplir con lo que la pareja sexual espera, e incluso llegar a sentir dolor.

Según la sexóloga Nuria Vanegas, volver a las relaciones sexuales luego de un período largo, tal vez años, la persona sentirá mucho temor e inseguridad, quizás por no recordar exactamente cómo era la experiencia, no saber cómo reaccionará su cuerpo o si es que se estilan nuevas cosas.

“Esto puede ocurrir cuando las personas solo han tenido una pareja sexual. Con todo esto, él o ella tendrá miedo e inseguridad frente a la idea de retomar su vida sexual, estamos hablando de una experiencia semejante a la de perder la virginidad con un grado mucho mayor de consciencia de lo que resultan ser las experiencias de pareja y expectativas diferentes de las que se tienen cuando se es ventiañero”, explica la sexóloga.

Esta situación puede ocasionar ansiedad que, a su vez, puede convertirse incluso en síntomas físicos como la disfunción eréctil (hombres) o la dificultad de experimentar el orgasmo (mujeres). Es decir, la persona se centra tanto en su pareja sexual y en agradarla que vive el encuentro desde la tensión y el estrés.

La especialista en parejas aconsejó como primer paso prestarle atención a sus emociones y trabajarlas, en caso de ser inmanejables, preferible en terapia. De lo contrario, hacer meditación o relajación ayudará.

“Una vez que estés mejor, es válido expresarse con la nueva pareja, compartir emociones y sentimientos y hablar de la sexualidad, así crearán un contexto de comodidad entre las dos personas, tú eres importante y lo que sientes también, aunque sea una relación esporádica, es fundamental escucharse, respetar los ritmos y expresar lo que se desea y lo que no, también”, detalla Vanegas.

Consejos

* Lo primero que debes tener en cuenta es que el sexo no es como la moda, que cambia constantemente, sino que más bien hay conceptos básicos que se mantienen al pasar del tiempo, no han cambiado mientras estabas ‘fuera del mercado’. Tu experiencia sexual será tan válida como la de cualquier otro al momento, por eso date un voto de confianza y recuerda que no es que te van a evaluar, se trata de que alguien quiere disfrutar contigo, así que disfruta con la persona que has elegido.

* Más allá del tiempo sin sexo, el hecho de estar con alguien al que no conocemos en la intimidad es lo que muchas veces aumenta la tensión. Para combatirla olvídate del pasado, toma las cosas con calma, no te lances enseguida al ruedo, concéntrate en los juegos previos para descubrir qué le gusta e intentar obtener el máximo placer del encuentro.

* Juega, explora, prueba y saborea antes de pasar a la penetración. En cuanto al ritmo aplica el justo equilibrio, ni muy rápido ni muy lento.

* No pretendas ser una bomba sexual, avanza disfrutando, si algo sale mal, ríete, tómalo con calma y continúa.

* Si estás disfrutando déjale al otro saber que lo disfrutas, a través de gemidos, o siendo explícita con tus palabras.

* Es normal estar nervioso (a), pero no permitas que esa emoción te domine, disfruta de las sensaciones y pásalo genial. Nada de tabúes con tu cuerpo, no sumes más ansiedad de la que ya tienes. Los buenos orgasmos y el buen sexo son producto de grandes niveles de deseo sexual, pero también de la interacción de ambos. Disfrutar del momento debe ser lo único importante en ese encuentro.

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