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Buena Vida

Muéstrale la foto a tu hijo y pregúntale si le gustaría que sea publicada.freepik

Protege la imagen de tus hijos en las redes

Subir fotos puede acarrear todo tipo de riesgos para el niño. Bullying, acercamiento de extraños y pedófilos, además de dañar su futuro crediticio

Aunque lo hacen de manera inocente, ya sea para dar a conocer la ecografía del niño que viene en camino, luego sus primeros pasos, o los méritos estudiantiles, un 75 % de padres comparte información de sus hijos en redes sociales, sin reparar en el daño que podría causarles en el futuro.

A esta acción que es común en las familias se la conoce como ‘sharenting’ (proviene de share (compartir) y parenting (crianza o ser padres), la cual conlleva muchos riesgos, como por ejemplo, ser objeto de fraude. Según un informe de Barclays Bank, se estima que para 2030 los costes de fraude provocado por información obtenida en casos de ‘sharenting’ ascenderán a más de 870 millones de dólares.

Esto se logra de manera sencilla. Una persona crea un perfil falso en alguna red social y utiliza la información pública de esa niña para hacerse pasar por un conocido o para manipularla según sus gustos, experiencias, etc. El mal uso de datos puede además, a largo plazo, dañar su historial crediticio.

En 2016, una encuesta de Nominet en Reino Unido demostró que niños de 5 años, contaban con más de 1.500 fotografías que sus padres le habían legado en sus redes sociales.

Según Daniel Ullauri, magíster en gerencia educativa, docente y asesor tecnológico, en la actualidad es común encontrar compañeros de la escuela, amigos del barrio cuando eras un niño, y con solo entrar a su perfil puedes ver fotos de sus hijos y otros familiares arrancando un suspiro de añoranza o nostalgia.

Pero, ¿cuál o cuáles son los riesgos que existen detrás de esa foto de ese niño o niña compartida? ”Privacidad y seguridad, como primer punto, ya que se expone su identidad a una audiencia desconocida pero si la intención es mantener conectados con familiares y amigos cercanos entonces es fundamental ser consciente de la configuración de privacidad y limitar dicha audiencia”, aconseja el experto.

Lo que es más grave aún, según profesionales en ciberseguridad del niño, es que la mitad de las fotografías que se encuentran en círculos pedófilos han sido extraídas de las redes sociales de padres que han compartido fotos de sus hijos.

"Una medida que debería ser considerada por todos los padres o tutores, es mostrarle la foto a su hijo y preguntarle si les gustaría que sea publicada", Daniel Ullauri, magíster en gerencia educativa, docente y asesor tecnológico

Más prudencia

Otro riesgo es que demasiada información sobre ese pequeño puede permitir el acercamiento de extraños, al punto de la confianza con él y fingiendo que lo conocen. Esto puede facilitar prácticas delincuenciales como el ‘grooming’ (ciberacoso sexual).

Ha habido casos en que fotos raras, curiosas o fuera de lo común de pequeños, que han sido compartidas por sus padres, como por ejemplo, haciendo todo tipo de muecas se han viralizado. Lo que para muchos es cuestión de memes o stickers que ruedan por las redes y en mensajes, para el protagonista puede resultar vergonzoso y hasta humillante. Incluso llegar al bullying.

Ullauri confirma que las futuras consecuencias del ‘sharenting’, es que las fotos publicadas en línea pueden tener un efecto duradero. Para evitar aquello, una medida que debería ser considerada por todos los tutores, es mostrarle la foto a su hijo y preguntarle si les gustaría que sea publicada.

Explicarles que estará disponible en las redes hasta cuando sean mayores. Aunque también entra el criterio del padre de saber cuándo una imagen deber ser o no publicada. ”Un riesgo mayor es el uso indebido de imágenes, ya que las fotos podrían ser robadas y usadas para fines maliciosos.

No importa si la compartiste por orgullo o amor a un hijo, la realidad es que hay que ser consciente de los riesgos que esto acarrea”, resalta el experto.

Se debe tomar conciencia al respecto ya que los padres son los únicos responsables de la seguridad física y psicológica de sus hijos a los que no se los debe someter a la sobreexposición. ”Hay mucho que pensar... reflexiona la necesidad de compartir, mantén una comunicación abierta con tus hijos y valora su seguridad por encima de todo”, sugiere Ullauri.