El crimen de una mujer, de 70 años, ocurrido cerca de una iglesia, en la calle Pedregal, Rumipamba, norte de Quito, dejó a dos personas detenidas. Entre los implicados se encuentra su nieto, según información policial inicial.

Las detenciones se realizaron en San Juan de Calderón, La Gasca y Llano Grande, todos sectores del norte de Quito, durante este 10 de abril. El caso se registró a las 10:20 del pasado domingo 16 de marzo, cuando la víctima acudía a un culto evangélico, en el sector Altamira, Rumipamba.

Los trabajos investigativos iniciales revelaron que dos sujetos a bordo de una motocicleta acabaron con la vida de la mujer, quien quedó sin signos vitales dentro del auto que conducía. Según los datos periciales, ella recibió, al menos, cuatro impactos de bala en el área del tórax.

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Los agentes de la Dinased hicieron las pericias correspondientes desde que se produjo el hecho. Ellos revisaron cámaras y entrevistaron a testigos, lo que arrojaron datos importantes como la participación de dos mujeres en el crimen.

Según las pericias, ambas fueron llevadas hasta el lugar de los hechos, a bordo de un carro Kía azul. Las dos traían consigo el arma de fuego que fue entregado a los sicarios para que acabaran con la vida de la víctima.

El papel del nieto en el crimen afuera de una iglesia

Los agentes de la Dinased, en conjunto a otros representantes de justicia, allanaron tres inmuebles. Como resultado se detuvo a dos hombres, entre ellos el nieto de la asesinada. Según la indagación, el hombre condujo el auto Kía azul hasta la dirección en donde estaba su abuela.

Dentro de ese automotor estaban las dos mujeres que llevaban el arma. Y durante las intervenciones, los uniformados localizaron este vehículo, en el inmueble donde estaba el pariente de la mujer baleada.

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Además, hallaron 970 dólares, ocho teléfonos celulares, un sello de una Notaría. Luego de la audiencia de formulación de cargos, tanto el nieto como el otro sujeto aprehendidos fueron enviados a prisión preventiva.

La instrucción fiscal que se inició en esta caso tendrá una duración de 90 días. Con los datos recabados, ahora los agentes están tras la pista de las mujeres que formaron parte de este brutal hecho violento.

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