A lo ‘rapidito’ y bajo nuevas normas. Así van cambiando las visitas conyugales en la ‘Peni’, que ahora ‘terminan’ antes de tiempo. Todo, debido a las restricciones impuestas por los frecuentes hechos de violencia ocurridos allí.

Las filas de quienes llegan a ver a sus parejas ya no son tan extensas. Tres de las pocas mujeres que han podido realizarlas le cuentan a EXTRA que solo pueden ingresar las que tienen a su ‘media naranja’ en el Centro de Detención Provisional.

Y aseguran que hay cosas que han cambiado desde los enfrentamientos del 28 de septiembre pasado, que provocaron el fallecimiento de 120 internos.

El protocolo de ingreso ahora incluye técnicas físicas para detectar si llevan algún objeto no permitido en las partes íntimas o alguna otra área del cuerpo. “Nos ponen a hacer ‘sapitos’ (saltos en cuclillas) con los pantalones y los interiores abajo”, explican.

Si bien ambas están de acuerdo en que se ejecuten acciones de seguridad a la entrada, reclaman que estas deberían hacerse utilizando equipos tecnológicos como detectores de metal, para no tener que hacer esas rutinas físicas incómodas y hasta denigrantes.

Refieren que lo de los ‘sapitos’ es nuevo. No les pedían hacerlos hasta antes de la atroz matanza. Otro aspecto que ha cambiado es el tiempo que han podido estar en las instalaciones.

“Nuestra visita es de 13:30 a 15:30. Un día nos hicieron entrar a las dos y más de la tarde. Solo estuvimos una hora casi dentro”, reclama una de las señoras.

Lo que sigue igual, como en el resto del año, es el ‘paniqueo’ que sienten en el centro de reclusión. Pese a que los relajos generalmente suceden en los pabellones y no en el CDP, no dejan de sentir temor de que se produzcan pleitos.

Mencionan que, a mediados de octubre, casi les suspenden una visita, pues ese día aparentemente había la alerta de incidentes en el pabellón 12. Sin embargo no pasó nada grave y pudieron entrar con normalidad. Eso sí, rezando a Diosito salir sin novedades.

INCERTIDUMBRE POR FECHAS

Las mujeres no saben si en algún momento les indiquen nuevas fechas para ver otra vez a los reos. Por ahora están comunicando frecuentemente los días de asistencia, sin un cronograma a largo plazo, mencionan.

Otra esposa de un interno entrevistada por EXTRA menciona que no le ha tocado lo de los ‘sapitos’ ni una reducción en el tiempo. Pero el nerviosismo es el factor común que comparte con las otras dos.

“A todas nos da miedo, pero en las dos veces que me ha tocado venir no ha pasado nada”, platica. Pero en meses anteriores sí le tocó escuchar detonaciones y disparos.

SNAI AÚN NO SE PRONUNCIA

A través de un correo electrónico al departamento de comunicación del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad (SNAI), EXTRA solicitó que se detalle si las visitas conyugales están o no suspendidas y qué parámetros contemplan para que se lleven a cabo luego de los hechos violentos suscitados en ese centro carcelario. Hasta el cierre de esta nota no se tenía una respuesta.

El 27 de octubre, a través de Twitter, el SNAI emitió un comunicado en el que se menciona que se ha realizado una planificación basada en las vulnerabilidades que tiene la institución. También se especifica que existe un avance en el plan de carrera de los guías penitenciarios y que se realizan controles y requisas en la ‘Peni’ junto a otras instituciones.