Con el rostro hacia el piso quedó tendida la joven venezolana Angie Núñez, tras recibir dos impactos de bala mientras trabajaba en un local de reparación de acondicionadores de aire, en la avenida Las Aguas, junto a Urbanor, en el norte de Guayaquil.

La ‘chama’, de aproximadamente 30 años, fue sorprendida por un sujeto que vestía un pantalón jean oscuro y camiseta y gorra grises, según informaron los testigos a la policía.

Tras atentar contra la víctima, el criminal habría corrido hacia el otro lado de la avenida para embarcarse en una moto negra y escapar en dirección a la ciudadela Urdesa.

De acuerdo con la información recabada por los investigadores, la extranjera llevaba 60 días de labores en ese local y no habría dado información de que alguien la hubiera amenazado.

El hecho se registró cerca de las 14:30 del jueves 29 de abril. Al día siguiente, el negocio permaneció cerrado y a la morgue no habían llegado familiares para retirar sus restos.

Asesinos en auto

Pocos minutos después del crimen de la joven venezolana, se reportó el asesinato de otra persona en el sur de la ciudad. La víctima fue Fabián Efrén Matute Murillo, de 34 años, quien fue interceptado y liquidado por unos sujetos que se movilizaban en un Chevrolet Spark color vino. Ocurrió en la manzana 21 de la ciudadela La Guangala, cerca del hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social.

Según registros policiales, Matute tiene dos detenciones, en 2012 y 2016, por tenencia de sustancias ilícitas.

Cinco ‘pepazos’

Media hora después, en el sector Horizontes del Fortín, en el noroeste porteño, David Adán Pivaque Rodríguez recibió cinco balazos. En consecuencia, fue trasladado al hospital Luis Vernaza, donde permanecía estable, detalló una fuente policial.

A Pivaque lo habrían atacado sujetos que circulaban a bordo de dos motocicletas tipo Pulsar, de color azul.

Lo remataron en el piso

A las 23:00, en el sitio conocido como La Olla, en la cooperativa 15 de Agosto del Guasmo Sur, fue acribillado Andrés de Jesús Mosquera Segura, de 32 años.

La víctima no registraba antecedentes penales y un testigo, quien pidió la reserva de su nombre, contó que el hombre supuestamente había llegado a comprar droga en el sector, pero fue baleado por unos individuos que llegaron en una moto.

Los sujetos le habrían ‘pegado’ dos tiros en el cráneo y luego, cuando cayó, “se acercaron a rematarlo”, relató el lugareño que habría observado el suceso.

En un reporte policial se confirma que la víctima se dedicaba al consumo de sustancias estupefacientes y que llevaba poco tiempo radicado en la urbe porteña. Antes residía en Quito.