La sentencia a 13 años con cuatro meses que el Tribunal Penal de Ambato, Tungurahua, impuso al autor y coautor del abuso sexual que sufrió una adolescente de 17 años, cuyo acto la llevó al suicidio, no satisface al padre de la víctima.

El papá asegura recordar cada día a su hija y el veredicto de los jueces no le compensa el dolor.

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El progenitor, junto con activistas del Colectivo Ana de Peralta, realizaron diversos plantones. Esperaban la máxima pena que es de 22 años, según asegura Maritza Gamboa, presidenta del colectivo.

La sentencia condenatoria dictada el martes 30 de enero  de 2024 incluye una multa de 20 salarios básicos y la reparación integral a la víctima de 10 mil dólares.

En mayo de 2023 la menor salió de casa para ir al repaso de una comparsa y después habría ido con sus amigos. La emborracharon y cuando ella recobró el conocimiento se vio semidesnuda sobre una cama. Dos días después de la violencia sexual ella se quitó la vida.

Además de los dos hombres sancionados, un adolescente es investigado por la Fiscalía de Justicia Juvenil para determinar si también participó en la agresión sexual. (YIE)

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