El fronterizo cantón de San Lorenzo, norte de la provincia de Esmeraldas, se convirtió en el escenario de un suceso trágico y espeluznante.

En un manglar de Pampanal de Bolívar, una zona que, aunque pintoresca, esconde los peligros de una creciente criminalidad, ‘asomaron’ los cuerpos si vida de cuatro hombres, de entre 21 y 41 años.

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Personal de la Dirección Nacional de Servicios de Atención a Personas Desaparecidas (Dinased) llegó a esta población, ubicada en el río Mataje, y a la que solo se llega en embarcaciones desde el puerto de San Lorenzo del Pailón, y se enfrentó a una escena desgarradora. Entre el hedor del agua estancada y la vegetación tupida encontraron los cuerpos.

Tres de los fallecidos fueron identificados. Santiago Antonio Preciado Macías, de 41 años; Rolando Joel Cuero Piguave y Luis David Macías Salazar, ambos de 21 años. Los tres son ecuatorianos y no registran antecedentes. El cuarto cadáver está sin identificar.

Según las primeras investigaciones policiales, las víctimas serían pescadores y presuntamente habrían sido asaltadas en alta mar.

El análisis inicial de los cuerpos reveló que tres de ellos presentaban múltiples heridas de proyectil de arma de fuego, mientras que uno más mostraba lesiones provocadas por un objeto cortopunzante. La brutalidad de los ataques indicaba que no se trató de un simple altercado, sino de un acto premeditado.

Las víctimas habían sido reportadas como desaparecidas desde el 24 de septiembre, tras haber viajado desde la parroquia Tonsupa hacia San Lorenzo, presumiblemente para realizar actividades comerciales. La búsqueda comenzó en el momento en que sus familiares no lograron establecer contacto con ellos. 

Un vehículo color blanco, abandonado en la avenida Gustavo Becerra se convirtió en la primera pista en la investigación. Los rastreos satelitales mostraron su trayectoria y llevaron hasta el camino donde se descubrió la tragedia.

Los investigadores buscan conexiones que pudieran explicar las razones detrás de este asesinato múltiple. Mientras los análisis forenses y las investigaciones continúan su curso, la comunidad de San Lorenzo, que ya ha sido testigo de actos violentos en el pasado, se encontraba en estado de shock con este nuevo hecho de violencia.

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