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Los vecinos han tenido que contratar tanqueros privados.YADIRA ILLESCAS

Ambato enfrenta una crisis energética y de agua potable

Por lo menos 24.000 habitantes sobreviven con agua de tanquero. Negocios al borde de la quiebra

Ambato enfrenta una crisis múltiple con los prolongados cortes de energía eléctrica sumados a la escasez de agua potable. Rocío Castro, residente del barrio Santa Cruz, cuenta que lleva más de dos semanas sin poder usar su ducha. “Parece que me van a dar una condecoración por saber racionar el agua”, comentó.

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También los vecinos de los barrios La Joya, Terremoto y El Calvario han experimentado interrupciones severas en el suministro de agua. Carlos Peña, presidente del barrio Santa Cruz, organizó una comisión para acudir a la Empresa Municipal de Agua Potable y pedir explicaciones sobre la situación.

La respuesta que recibieron fue que los cortes de luz prolongados impiden que se pueda bombear el agua de manera efectiva desde los pozos hasta los reservorios. “Nos dijeron que el problema afecta no solo a Santa Cruz, sino a muchos barrios más”, relató.

Por su parte, Byron Pinto, gerente de la Empresa Pública Municipal de Agua Potable (Emapa), confirmó que la crisis hídrica afecta a gran parte de la ciudad, en especial en la zona norte. “Inicialmente calculamos que alrededor de 50.000 habitantes estaban siendo afectados, pero con los esfuerzos de los técnicos hemos logrado reducir esa cifra a 34.000”, explicó Pinto.

Vecinos acudieron a la Empresa de Agua Potable en busca de respuestas.YADIRA ILLESCAS

Afectación en la economía

La falta de agua no solo afecta las actividades cotidianas, sino que también ha tenido un impacto devastador en la economía de los hogares.

Hernán Aúz, presidente de la Asamblea Ciudadana Unidos y Solidarios de los Barrios de Ambato, señaló que la combinación de cortes de electricidad y escasez de agua está llevando a la quiebra a pequeños negocios, especialmente aquellos que dependen del agua para sus operaciones diarias.

“Muchos hogares ya han tenido que ajustar sus presupuestos para comprar agua, lo que es un golpe adicional para familias que ya están luchando por sobrevivir”, comentó Aúz. El problema ha llevado a algunos vecinos a unirse para comprar agua de los tanqueros privados, que cobran hasta 50 dólares por cada tanque de agua.

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