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Opinión

Editorial: La sorpresa del No

Todo parecía estar dispuesto para que los colombianos aprobaran los acuerdos de La Habana, publicitados muy solemnemente por el presidente Santos y el jefe de las FARC, el llamado ‘Timochenko’.

Durante la campaña por su aprobación, se pensaba que el Sí ganaría muy holgadamente, pues contaba, al parecer, con el respaldo de la generalidad de los votantes colombianos, con todos los medios de comunicación a su favor, con la Iglesia nacional y hasta con el papa y la ONU propugnando el acuerdo. Frente a tal fortaleza era indudable la victoria del Sí.”

Pero una cosa es el panorama y otra distinta suele ser la realidad y ante tal circunstancia, y una pregunta tramposa, el No dio una sorpresa mayúscula, ganando el plebiscito, aunque fuera con una mínima ventaja y dejando a Colombia dividida en dos mitades y con la necesidad de recompensar su postura y de buscar nuevos acuerdos que dejen atrás los alcanzados en La Habana o que, el menos, los modifiquen, pues unos y otros sostienen que desean la paz, pero no lo que los partidarios del No consideran como una entrega del país a la guerrilla.