Exclusivo
Actualidad
Joven fue tomado como escudo humano en un parque del norte de Guayaquil
Familiares aseguraron que un amigo agarró al joven para cubrirse de los balazos. Hace cuatro días celebró su cumpleaños 19.
Hace 5 días la familia Gallardo Rivas celebró con una reunión el cumpleaños del último de sus hijos, Kevin Israel. Cuatro días después su alegría se convirtió en lágrimas, su descendiente fue asesinado a tiros.
El joven, quien el pasado sábado cumplió 19 años, fue baleado la noche del miércoles en un parque de la ciudadela Sauces 5, en el norte de Guayaquil. Estaba acompañado de varios amigos cuando seis delincuentes, dos en cada moto, llegaron para disparar. Otras tres personas, entre ellas una mujer, resultaron heridas.
Con la esperanza de salvarle la vida trasladaron a Kevin hasta una casa de salud. Allí el médico les indicó que ya nada se podía hacer, porque su ser querido no tenía signos vitales.
“A las 20:00 mi hijo me dijo: ‘mami, dame permiso que voy al parque’. En el lugar había personas jugando volley y madres con sus niños. Al rato escuchamos los disparos. Salimos corriendo de la casa a buscarlo. Lo vimos tirado en el piso. Sus amigos habían corrido despavoridos”, recordó entre lágrimas Vanessa Rivas, su madre.
Luis Gallardo, su progenitor, aseguró que su hijo fue tomado como escudo por uno de sus acompañantes, quien, al parecer, es la persona que buscaban los criminales.
“Mi hijo no pudo correr, porque cuando llegaron los asesinos estaba de espalda, no los vio”, contó Luis.
Recordó al más ‘chiquito’ de sus hijos como un muchacho alegre, sonriente y amiguero y quien siempre estaba presto a ayudar a sus hermanos.
“Era quien nos hacía los mandados, ‘papi yo voy’. El día de su cumpleaños su mamá le preparó su comida favorita, arroz con puré y hamburguesa, estábamos tan alegres, hoy estamos destrozados. Nunca pensé que una desgracia me arrebataría a uno de mis hijos”, lamentó mientras aguardaba en la morgue por el cadáver de su consentido.
Otra tragedia en 43 días
En el mismo parque, a escasos 10 metros de distancia, el pasado 14 de junio, se produjo un hecho similar. En aquella ocasión la víctima mortal fue Alexander Castro, de 20 años.
El chico fue atacado a tiros por unos sujetos, quienes también llegaron en moto. Le descargaron varios disparos en la cabeza y cuello. Su muerte se corroboró en un hospital.
Cansados de tanta inseguridad, moradores pidieron a las autoridades más control policial y que los consumidores de droga sean retirados de este lugar. “Irónicamente hay un letrero que dice: ‘Un lugar seguro para tus hijos’, pero de qué seguridad hablamos si ya han ocurrido dos asesinatos en tan poco tiempo”, manifestó una moradora, por temor a represalias.