La muerte la sorprendió a las puertas de su casa, en el barrio San José, más conocido como el sector Siete Puñaladas, en la parroquia Tarqui, de Manta, en la provincia de Manabí. En el sitio, dos individuos que fingían ser trabajadores de la Empresa Eléctrica esperaban para arrebatarle la vida.

Y fue por el atuendo de los criminales que la abogada Diana Yessenia Cedeño Santos, de 40 años, quien era funcionaria en el Patronato Municipal de la localidad, no habría sospechado que la ‘huesuda’ estaba a punto de llevársela, la tarde del 6 de agosto, cuando llegaba a su vivienda en compañía de su hijo, de 15 años.

El coronel Luis Banda Padilla, jefe distrital de la Policía, confirmó estos detalles y explicó que “la señora estacionaba el vehículo cuando se acercaron los dos individuos disfrazados y descargaron varios disparos (...). El hijo de la víctima recibió un tiro en el muslo derecho y fue trasladado a una casa de salud (se encontraba estable)”.

Sin amenazas

Los familiares de la funcionaria municipal informaron a los investigadores que ella, al parecer, no había recibido amenazas, que no tenía enemigos y que tampoco registraba alguna deuda pendiente.

¿Por qué la mataron? Es la pregunta que flotaba en el aire y que incluso la Policía (hasta el cierre de esta edición) aún buscaba esclarecer, porque se trató de un suceso ejecutado con un alto nivel de violencia, lo que evidencia premeditación, de acuerdo con las indagaciones preliminares.

Fuentes oficiales detallaron que en este crimen no hubo improvisación, porque los indicios detectados demuestran que hubo un seguimiento de las rutinas de la víctima, pues los ‘gatilleros’ supieron con exactitud cuándo atacar.

Harto plomo

En la escena del suceso, los peritos de Criminalística levantaron 25 vainas de proyectiles.

El crimen ha provocado terror en la barriada. “Esto parecía el viejo oeste, era una traqueteadera similar a las que hay en fin de año (...), pero esta vez era porque a la vecina la habían matado”, narró un lugareño, aún asustado.

En reportes a los que EXTRA tuvo acceso, consta que los dos asesinos utilizaron pistolas semiautomáticas, calibre 9 milímetros.

Crimen quedó grabado

El suceso fue captado por cámaras de seguridad, cuyas grabaciones fueron revisadas por peritos. En las imágenes, según se conoció, se corroboró que los sicarios llegaron caminando y empezaron a fingir que inspeccionaban medidores y postes, hasta que la víctima arribó. Tras lograr su cometido, huyeron en un Hyundai Tucson.

El coronel Banda lamentó que de parte de los parientes no se proporcionó más información. Él señaló que tal vez lo hacen para protegerse de alguna situación. No obstante, eso ha complicado establecer un hilo conductor del porqué del asesinato.

Al ser consultado por los hechos de sangre suscitados en Manta, considerada la ciudad más violenta de la provincia, Banda aseguró que la mayoría de estos casos están relacionados a los enfrentamientos entre organizaciones delictivas.

“Bajo rendimiento de la resolución de casos”

María Beatriz Santos, concejal de Manta e integrante del Consejo de Seguridad, cuestionó que “existe un bajo rendimiento de la resolución de casos por parte de la Policía Nacional, y no porque ellos no hagan su trabajo, ellos hacen su mejor esfuerzo con los pocos recursos que tienen”.

Y añadió: “Pedimos al Gobierno Nacional que equipe y fortalezca a la institución. Es preocupante que hoy matan a alguien y no se detiene a nadie (...). Esa persona va a seguir matando”.