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Farándula
Mirella Cesa y las razones por su intermitencia en la música, luego de Viña de Mar
La cantante acabó de lanzar su álbum ‘De vuelta al pesebre’ que contiene 7 temas inéditos. Habló de este y otros temas a EXTRA
Desde que ganó la Gaviota de Plata en 2018 en Viña del Mar con su tema ‘La corriente’, Mirella Cesa ha tenido momentos de pausa en su carrera artística. Primero, la pandemia interrumpió sus proyectos y luego llegó una nueva etapa en su vida como madre de su primera hija.
(Lea también: Mirella Cesa se convirtió en mamá por segunda ocasión)
En esta entrevista, la artista aborda su regreso a la música y otros temas, en el marco del lanzamiento de su nuevo álbum ‘De vuelta al pesebre’.
Musicalmente, ¿cómo describe este año que ya está por terminar?
De gratitud. Este año ha sido de preproducción para lo que va a salir. Se vienen muchos temas nuevos.
Se ha reactivado, ¿habrá otras pausa en su carrera?
Bueno, en realidad, eso pasa porque hemos llegado a un momento musical en donde me estoy involucrando más en la parte de producción. Hacer temas no es decir: Vamos a entrar 15 minutos al estudio y lanzar un tema por lanzar. Al menos para mí, la música no es eso. La música tiene que ser una pieza que salga y se quede para siempre en la estela de la escena musical. Prefiero lanzar un sencillo que tenga un significado importante antes que diez canciones que sean totalmente volátiles.
Pero, ¿hubo factores para que se dieran esas pausas?
Creo que eso tiene mucho que ver con mi manera de trabajar, soy muy exigente. Después de Viña vino la pandemia. Luego quedé embarazada de mi primera hija. Después lancé un disco completo llamado ‘La Quinceañera’, que lamentablemente no tuvo la difusión que me hubiera gustado. Pero eso no depende de uno. Cuando eres un artista independiente, lanzas música, pero si los medios de comunicación quieren apoyarte, lo hacen; si no, no. Aun así, considero que hemos estado haciendo música y no pienso dejar de hacerlo.
A raíz de su participación, más ecuatorianos han llegado a Viña. Usted abrió el camino para la nueva generación.
Me siento feliz porque, siempre que uno viaja a otro país y desempeña un buen rol, abre una estela para las nuevas personas que vienen, porque dejas un estándar de calidad y propuesta. Gracias a Dios obtuvimos una Gaviota. Después de eso, nos quedamos haciendo promoción en Chile y luego fuimos a Argentina. Me encanta saber que ese impacto se sintió en los colegas que participaron después.
El próximo año nos representarán Las Damas de Oro en Viña. ¿Qué consejo les daría?
Las quiero mucho. Con Lila he compartido muchísimo. Cuando recién comencé, había una gira de conciertos llamada ‘Los Corazones Azules’, donde alterné con ella. Katty Elisa es una maestra; tienen todo para brillar. Son mujeres muy talentosas y estoy segura de que tienen todo para ganar. Siento que harán un excelente papel. Les diría que lo disfruten, que se diviertan, porque son experiencias que pasan muy rápido. Uno mira hacia atrás y aún no cree lo que vivió.
El charango conquistó Viña. ¿Es el instrumento al que más cariño le guarda?
Le tengo un amor especial por la identidad que representa. Esas texturas sonoras que escuchaba desde pequeña fueron mis influencias para decidir que quería incluirlo en el pop. Me encanta porque aporta algo fresco y diferente a cada producción.
¿Al inicio dudó en mezclar pop con los sonidos del charango?
Creo que todos los inicios están llenos de dudas, porque son cosas nuevas. Me decían que optara por el ukelele, ya que tiene un sonido más comercial, mientras que el charango es más folclórico. Aunque ambos instrumentos representan folclor de diferentes partes del mundo, yo soy un poco terca y me gustan los retos. Siempre fue mi deseo tener esa textura en mis producciones. Le fui fiel a mi corazón y a mi instinto.
¿Solo canta música con mensajes positivos?
Totalmente. Hay que ser consecuente con lo que uno es. Ese es mi espíritu, mi esencia, y eso es lo que me representa.
No tendría miedo de que sus hijas escuchen sus temas cuando crezcan, porque tienen un mensaje en sus letras, ¿cierto?
Totalmente, a parte yo no escribo lo que no siento, si estoy sintiendo algo, lo escribo y soy consecuente con mi sentir, me paso que al inicios quería escribir con otros artistas, pero después te das cuenta que hay opiniones distintas, y después la canción se transforma en algo que no eres. Es un proceso personal el escribir un tema.
¿Siente que, de alguna manera, usted ha abierto el camino para que más mujeres se sumen a la industria musical?
La industria siempre ha existido en Ecuador, y ha habido grandes mujeres como Patricia González y Pamela Cortés, a quienes admiro profundamente. Ellas quizás sembraron en mi corazón la semilla para abrir camino, y de alguna forma, yo también he podido plantar esa semilla en los corazones de la nueva generación de cantantes mujeres y verlas brillar es increíble porque entre más propuestas existan afuera, la industria se desarrolla con más solides y el público de aquí cree más en lo que proponemos los artistas ecuatorianos.
Luego de la pandemia se evidenció más las colaboraciones musicales entre artistas, ¿cree que eso tuvo que ver?
Las redes sociales también tiene que ver porque hoy en día le puedes escribir directamente a un artista por redes sociales para conocerse y hacer una colaboración, ya no es el protocolo de antes de hablar con el mánager que a veces filtraba esa conversación porque no quería que conozcas a su artistas, pero esta manera de tener contacto directamente, hace que se abran oportunidades. No hay estrategias de unirse con artistas, más bien, buscas ir alineado en lírica y mensajes con otros. Gracias a Dios, he cantado con artistas que admiro y quiero y ha sido una experiencia increíble.
¿Se ve participando en otro festival de música o en otras premiaciones?
En realidad, Viña del Mar es el único festival en donde compites. Hay uno en Europa que me encantaría, pero tiene que ver con darle tiempo para que nazcan nuevas canciones. Así como me sentí segura con ‘La corriente’, aplicaré cuando llegue el momento y tenga una canción adecuada. Por ahora, no tengo afán, estoy más enfocada en hacer música honesta con la que la gente pueda conectarse.
¿‘La corriente’ es su tema favorito?
No, para mí, mi favorita es ‘Cuando me miras’. Es un bolero, ese tema tiene un lugar especial en mi corazón, el que más me representa y amor.
Regresa a la música con un álbum navideño...
Se llama ‘De vuelta al pesebre’, que contiene siete canciones inéditas: ‘Dar’, ‘Tilín Tilín’, ‘Ven’, ‘Din Don’, ‘Hoy’, ‘Te regalo’ y ‘Ser feliz’. Todas tienen como propósito seguir difundiendo nuestras tradiciones, el compartir, la unión y hacer hincapié en el verdadero significado de la Navidad: el nacimiento de Jesús en nuestros corazones.
¿Cuál ha sido el regalo más especial que le han dado?
Los dibujos que me hacen mis hijas, cuando vienen las chicas del club de fans y me regalan charangos tallados por ellas, a los que les mandaron poner mi nombre, son regalos muy especiales. Recuerdo que, hace un año, me regalaron una camiseta bordada con sus nombres; era una prenda típica nuestra. La enmarqué, la puse en un cuadro y ahora está en mi estudio. No es el objeto en sí, sino el tiempo y el esfuerzo que dedican para dar algo que llena el corazón.
¿Cómo son sus navidades?
En mi caso comparto tiempo de calidad con mis hijas pequeñas, armando el pesebre, cantando villancicos, haciendo los adornos en el arbolito, cositas que parecen insignificantes, pero que cuando creces, te das cuneta que son esenciales.
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