Exclusivo
Farándula
Cristina Reyes y Patrick Mittaz: ¿Qué hay detrás de su divorcio?
La candidata a la vicepresidencia por el movimiento Amigo reveló que su decisión fue radical. En junio firmó los papales, pero era un secreto...
Cristina Reyes duró dos años y medio con anillo de casada. Ahora, parafraseando la canción ‘Soltera’ de Shakira, la política guayaquileña está como abeja reina: botando miel.
(Lea también: Cristina Reyes reveló en exclusiva que se divorció del empresario Patrick Mittaz)
El matrimonio con el empresario quiteño Patrick Mittaz, celebrado en febrero de 2022 en Manta, donde Cristina lució un hermoso vestido rojo, algo fuera de lo común, fue una celebración con dulces manabas, traguitos y hasta grupos vallenatos; pero todo eso quedó en recuerdos. En julio pasado se divorciaron, como ella confirmó en exclusiva a EXTRA.
La candidata a la vicepresidencia por el movimiento Amigo, de 43 años, mantuvo la noticia en reserva, ya que no le gusta hablar de su vida privada..
Tomó la decisión de divorciarse. ¿Hace cuánto sucedió esto y cómo lo vivió?
Esta es la primicia. No he hablado públicamente de este asunto porque no siento necesidad de hacerlo. Solo puedo decir que la gente sabe que soy una mujer con determinación, valor y amor. Todo lo que entrego de mi corazón es amor: a mi familia, a mi país, respeto y lealtad a quienes han tenido la fortuna de estar a mi lado. Hoy estoy como Shakira, tal cual dice su canción: soltera. Estoy comprometida y, sobre todo, casada con mi país.
Sobre este tema, muchas veces las mujeres enfrentan prejuicios sociales. Hablar de divorcio suele interpretarse como un fracaso. ¿Qué opina?
Los nuevos ciclos y comienzos son bendiciones y oportunidades que Dios nos da para descubrir de qué estamos hechos. Estoy hecha del temple de los guayaquileños, quienes siempre nos hemos levantado de las cenizas frente a incendios, piratas, pandemias y adversidades. Somos seres alegres, emprendedores y amorosos. Eso lo llevo a todas las etapas de mi vida, tanto en la política como en lo sentimental. Por eso, la gente me ha visto a lo largo de estos meses actuando con discreción. Dejo que hablen; me da igual que hablen de mí.
¿Qué aprendizaje le dejó esta relación?
Te diría que soy amor. Cristina, independientemente de las circunstancias y condiciones, siempre se va a mantener con dignidad, altivez, sencillez y todo ese amor que tengo para dar y demostrar. Dios es amor, y estoy segura de que los grandes anhelos que guardo en mi corazón llegarán oportunamente porque me los merezco.
Eso es amor propio
El amor propio es el gran amor de nuestras vidas. Esa es una gran lección que he aprendido. Muchas veces llamamos ‘amor de nuestra vida’ a alguien, pero en realidad es uno mismo, es la familia y esas personas que todos los días nos demuestran cariño, lealtad y respeto. Yo sigo adelante siempre, tal como Shakira, que es la gran revelación. Creo que no hay mujer más virtuosa, trabajadora, profesional y que, lamentablemente, vivió una tormenta con un cretino (el exfutbolista Gerard Piqué). Hoy ella le ha demostrado al mundo lo que es ser una mujer con valor, y se lo ha transmitido a muchas mujeres. Por eso, mi misión en la vida es demostrarle a las mujeres ecuatorianas todo lo que podemos lograr. No importa la adversidad, estamos en este mundo no para habladurías ni chismes, ni para personas desocupadas que se pasan hablando de alguien más, sino para grandes hazañas.
Los chismes en redes sociales generan todo tipo de comentarios, desde apoyo hasta ‘hate’. ¿Cómo lo maneja?
Sabiendo quién soy. Lo digo con humildad. De mí pueden decir que soy fea, guapa, gorda o lo que sea. Yo sé lo que tengo que demostrarle a mi país. Claro, hay mujeres que se afectan por esa falta de empatía. A veces me encuentro con personas que dicen horrores en redes, pero frente a mí no saben qué hacer. Por mi parte, algunos tendrán que esforzarse mucho más, porque me dicen cosas que me entran por un oído y me salen por el otro, así que ¡mírame y castígate!
También la vemos regia, ¿cuál es el secreto?
Muchos te hablarán de dietas. Yo me sometí a un proceso que se llama explantación mamaria. La gente me recordará voluptuosa, con tremendas chichis, pero eso ya no más. Se removieron y ahora son completamente naturales, un proceso que recomiendo. Además, la ocupación, el trabajo y la alimentación también son factores importantes. Ahora que estoy en campaña, me dan de comer rico: encebollado, bolón, pero hay que tener equilibrio.
¿Cómo le afectaron los señalamientos que le hicieron por haber trabajado con Mayra Salazar, quien fue condenada por delincuencia organizada y pieza clave en los casos Metástasis y Purga?
Para nadie es hermoso que te señalen injustamente. Fui víctima de una campaña de desprestigio por personas que no vale la pena mencionar, que no pueden venir al país, que andan caminando por los techos, que no pueden caminar por las calles del país. Tengo mi conciencia tranquila y mis manos limpias. A mí no me llamaron a declarar en un proceso judicial porque no he sido investigada o procesada. Todo lo que se dijo fue mentira. La verdad se para sola; la gente me ve que estoy tranquila.
¿Ahora se la piensa dos veces antes de sumar a alguien en su equipo de trabajo?
Yo a Mayra la contraté por sus credenciales profesionales; trabajó en varios medios de comunicación, los cuales, por cierto, hicieron señalamientos como si uno es responsable de lo que la pareja haga. La responsabilidad penal es individual. Cuando ella trabajó conmigo cumplió con su trabajo profesional de relacionista pública. Es lo único que tengo que decir; todo lo demás fueron inventos y chanchullos.
¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!