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Farándula
Cristina Reyes: “Soy bien destapada”
La parlamentaria andina, reveló que aplica sus principios en la intimidad y gobierna entre sábanas. En pocos días contraerá nupcias con el quiteño Patrick Mitaz.
Atrevida, apasionada y de carácter fuerte. Así se considera Cristina Reyes, parlamentaria andina y exasambleísta nacional, quien está a pocos días de dar el “sí” en el altar, con su prometido, el empresario quiteño Patrick Mitaz.
EXTRA le organizó una despedida de soltera... ¡a su manera! Y hasta le dio un postre ‘pícaro’. Ella, en cambio, reveló secretitos de su intimidad previo a la noche de bodas, momento para el que, dijo, aún no tiene preparado un ajuar, pero promete escoger algo sexy.
“He tenido múltiples ocupaciones por el cargo político que ejerzo y por otras actividades particulares, pero ya veré qué me invento para esa noche”, agregó la mujer, de 40 años.
Cristina cuenta que a su vida laboral y personal le mete corazón, ganas y es muy exigente. Y en lo íntimo, a pesar de que hay momentos en los que guarda las formas, “también soy un poco salvaje”.
La democracia es uno de los principios fundamentales en su vida. Y este también tiene cabida entre sábanas, en donde, según ella, el juego de la seducción es un vaivén y una explosión de emociones.
“La mezcla de amor con intimidad y sexualidad es deliciosa. Por ser poeta, me gusta explorar las sensaciones. Me dejo llevar e intento descubrir y siempre maravillarme por las cosas lindas de la vida”, mencionó.
Pero la fortaleza de su carácter no solo se ha reflejado en la rigurosidad de sus intervenciones en debates de leyes, también se hace eco en su porte y personalidad.
“Patrick siempre se esmera mucho para consentirme, quererme y lo que más me derrite de él es que es absolutamente detallista”, dijo.
“Si algo me seduce de un hombre es su inteligencia, carácter y ambiciones. No me llaman la atención o me elevan fantasías los hombres musculosos. Me gustan los que me retan a ser mejor persona, ambiciosa de sueños y aspiraciones”.
Aunque se resiste a revelar qué la vuelve loca en la intimidad, al final cede. “No soy mojigata, al contrario, soy bien guayaca y conmigo todo siempre es de frente. Soy bien destapada. Con eso ya les digo todo”, desveló.
Cristina aclaró que su carrera política no dejará de ser una prioridad, así como su futuro esposo; y que continuará trabajando por el bienestar del país.
“Se lo dije al oído cuando me pidió matrimonio. Él sabía que mi gran sueño es el Ecuador y que tengo un compromiso con mi pueblo. Le pregunté si estaba dispuesto a acompañarme y también me dijo que sí”, finalizó.
Defectos
La impuntualidad es el único defecto que le ve Cristina a su futuro esposo.
Poesía
Para dar sus votos matrimoniales, la parlamentaria hará un poema.
Ceremonia
La boda se realizará en una residencia privada en Manabí, junto a familiares y amigos íntimos.