La vida amorosa del presentador Carlos José Matamoros ha mantenido a la farándula nacional muy movida, en casi dos décadas. Él ha salido con más de una famosa del medio artístico.

En su lista aparecen Andrea Bucaram, Paola Farías, Yuleysi Coca, entre otras. Dicha situación ha provocado que en más de una ocasión se comente sobre la estabilidad emocional del guayaquileño, de 46 años, quien se sincera con EXTRA y habla del tema.

Se habla de un ‘Muñeco de la ciudad’ (Vito Muñoz), pero usted no se queda atrás...

He tenido las mujeres más bellas del país y podría decir, con total seguridad, que llega un momento en el que la belleza interior se vuelve más importante que la exterior.

¿Entonces se dejó llevar por la apariencia?

Diría que tal vez me dejé llevar mucho por la imagen, sin acordarme de que todos buscamos una mujer que nos ame realmente. Claro, todo entra por los ojos, tampoco voy a mentir y hacerme el ‘santurrón’, pero cuando ya fracasas tantas veces como yo, aunque fracasos hermosos porque las mujeres han sido bellas, piensas diferente.

¿Se lleva bien con todas?

Me llevo bien con todas las personas. Comprendo que nadie está excepto de cometer errores.

¿Cómo las conquista?

Soy un hombre cariñoso y súper preocupado. Soy de los que está pendiente de si llegó, se fue, si está segura. Pienso que no es labia, sino que trato de darle lo mejor a mis parejas.

Muchos dicen que mantuvo varias relaciones amorosas por cierta inestabilidad emocional, ¿qué piensa de eso?

Dicen inestable, pero lo que pasa es que tengo un pensamiento que no lo voy a cambiar jamás. Si estoy con alguien, es para ser feliz y si por algún motivo no es así, en vez de odiar, destrozarme o pelear, me retiro de la mejor manera. No voy a mantener una relación para hacer feliz al público. No voy a sacrificarme para que el resto diga ‘Ay, qué estabilidad la que tiene Carlos José’.

¿Y ese típico luto al terminar una relación?

Eso no existe. Esa es una moda absurda que llegó de no sé dónde. Todo el mundo no es igual. No puedes pedir que alguien se comporte como tú. Es estúpido. Piensan que esa es la manera correcta de salir del dolor o fracaso y no piensan en que hubo otro tipo de circunstancia que los separó.

No le duele que muchos comenten o critiquen su vida...

No me duele nada de lo que me digan. Soy sumamente enfocado y concentrado en mí, en mi felicidad, triunfos como profesional y como ser humano. Yo no hubiese triunfado en mi vida si hubiese puesto como prioridad los comentarios y pensamientos de la gente.