En paz, agradecido con la vida y la naturaleza, así se encuentra el cantautor argentino Axel, quien luego de la pandemia regresa a la música. Hizo una pausa obligatoria que se inició a finales de 2019 cuando una joven de Río Negro, en Argentina, lo denunció por “abuso sexual simple”, a raíz de un hecho que habría ocurrido en 2017.

Sin embargo, la Justicia de su país archivó la causa contra él por falta de pruebas y por la ausencia de los testigos presentados por la parte demandante.

La pandemia y sus experiencias pasadas llevan a Axel a revolucionarse y salir de su tradicional balada, que es su marca registrada a lo largo de más de 20 años de carrera y ahora canta algo ‘movidito’.

“Solo por hoy es una canción de cumbia-pop alegre, motivadora, que invita a disfrutar el día a día (...) en cada disco me gusta arriesgarme, soy de los que se reinventa”, dice Axel a EXTRA.

El cantante, de 45 años, tenía la necesidad de contar lo que le estaba pasando en el aislamiento. “Me di cuenta de que desde 2004 no estuve más de 15 días en casa. Quedarme todo este tiempo fue interesante y pude componer mucho”, añade.

SU ESENCIA

Axel fue nombrado el primer embajador en América Latina de National Geographic (2018), pues siempre se ha preocupado por la conservación del medio ambiente y trata de demostrarlo con su ejemplo a sus seguidores, a través de las redes sociales, incluso cuando visita otros países.

Cuando va a un hotel durante las giras musicales trata de aportar con un ‘granito de arena’ al medio ambiente, creando conciencia en quienes lo acompañan o están trabajando en el mismo lugar.

“En la puerta pongo un cartelito de no molestar, porque no pretendo que me cambien las sábanas, las toallas, ni que gasten tiempo limpiando porque por lo regular me quedo cuatro días hospedado y no es necesario que las cambien en ese tiempo. Tampoco me gusta que me llenen de jabones y champú”, detalla.

Recalca que no se cree divo, al contrario, cuando está de gira aprovecha ese tiempo y se dedica a componer.

“Solo pido que tengan la comida adecuada, que se adapte a mi filosofía de vida. No como animales hace más de 20 años, simplemente eso. No me traigan carne, jamón, ni pescado y, en lo posible, la mayoría de cosas orgánicas”, dice. Y agrega que en su equipaje no puede faltar su mate y su estudio de grabación portátil.