El caso de la primera medallista venezolana en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020 tiene felices y orgullosos a los venezolanos, no tanto por la medalla de oro conseguida para su país, sino por la historia de superación que hay detrás de ella y que llena de esperanzas a sus compatriotas.

El rotativo venezolano El Diario informa hoy que al nacer, Clara Fuentes tuvo complicaciones, pues no estaba en posición para salir del vientre materno por lo que fue extraída prácticamente a la fuerza, lesionando los ligamentos de sus rodillas.

La artrogriposis múltiple congénita comenzó a formar parte de su cuerpo desde que vio la luz y una silla de ruedas se convirtió en su amiga inseparable para poder trasladarse.

"Me considero una mujer muy capaz e independiente. Gracias a Dios, mi familia y mis amigos nunca tuvieron ese trato especial que la mayoría de las personas tienen con una persona con discapacidad. Me siento bien, y si tengo un problema le busco la solución o las vueltas más posibles”, expresó la joven la caraqueña en entrevista a El Diario.

El consejo que cambió su vida

Los inicios de Fuentes  en la parapotencia fue gracias al consejo de una señora que también andaba en silla de ruedas. Fue en 2016, ambas hacían compras en un mercado donde lograron conversar durante unos minutos. Esa desconocida pero amable dama le dio el mejor consejo de su vida: practicar algún deporte, pues notaba que tenía físico para ello.

“Le dije que no. Entonces me invitó a que practicara levantamiento de potencia, para ver si me gustaba. Ella me dijo que podía viajar por el mundo y representar al país”, añadió Fuentes.

Al principio no entendía mucho de qué trataba esta disciplina, pero con el tiempo fue tomándole gusto.

Un gran palmarés

A sus 24 años de edad, tiene un gran palmares: ganó medalla de plata con récord parapanamericano juvenil en 2017 y este jueves logró medalla de bronce en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020.