Uno de los grandes formadores del baloncesto ecuatoriano nos dejó. John Escalante falleció la noche del lunes 12 de julio, en su domicilio, a causa de un paro cardiorrespiratorio.

El experimentado entrenador hace aproximadamente un mes dirigió a la selección ecuatoriana en la eliminatoria ante Bolivia por la clasificación al Premundial, y actualmente estaba impartiendo los cursos vacacionales de la Concentración Deportiva de Pichincha.

Conmoción causó su repentina muerte en el mundo del deporte de la canasta, donde dirigentes y jugadores dieron a conocer su pesar por el triste suceso.

“John siempre fue estricto, exigente, pero también hacía reír, brindaba su amistad a todos. Armaba buenos planteles de jugadores, pero también un grupo de amigos”, destacó Erick Jiménez, quien fue parte de su cuerpo técnico.

María Tobar, quien fue su pupila durante su paso por el equipo de la Universidad Técnica Equinoccial (UTE), confesó que “estoy muy triste por su fallecimiento de forma intempestiva. Nos duele mucho lo que ha sucedido”.  Agregó que “era un entrenador que te motivaba siempre, estaba pendiente del más mínimo detalle”.

A estas palabras se sumó la exbasquetbolista Anabel Hermosa, quien recordó que “John fue un apasionado y comprometido con el deporte provincial y nacional. Compartimos muchos campeonatos y gratos recuerdos de amistad en el equipo de la UTE”.

Jaime Ruiz, presidente del Team Pichincha, resaltó que Escalante “fue un inmejorable profesor y técnico. Miles de jóvenes recibieron sus enseñanzas, nos deja un gran legado”.

José Arévalo, mandatario de la Federación Ecuatoriana de Baloncesto, señaló que “solo puedo decir gracias por su ayuda con esa pasión de siempre para que todos conozcan que en este deporte no existe regionalismo y que todos somos una familia”.