Toño Abril, ex participante de programas de realitys, ya no quiere regresar a la televisión ecuatoriana. Su meta principal es ampliar su restaurante, cuya especialidad es el pollo asado.

El local que abrió hace 7 años, en el norte de Guayaquil, estuvo cerrado más de dos meses debido a la pandemia de coronavirus. Hace dos semanas reabrió sus puertas, pero esta vez es el excompetidor de los realitys Calle 7 y BLN, es quien lo administra y se hará cargo de él hasta convertirlo en el número uno de la ciudad.

“La sazón del pollo la sacó mi papá, siempre le ha gustado la cocina. De hecho, queremos abrir sucursales en Cuenca y otra más en Guayaquil, ofrecemos un pollo diferente del resto”, aseguró Abril, quien pasó la cuarentena en el austro del país, de donde es oriundo.

La receta que realza el sabor de las aves prefiere guardarla, así como el número de pollos que vende al día y que los clientes deben pedir con cuatro horas de anticipación. “Nos va muy bien. Compramos un horno más grande. Tenemos siete motorizados que entregan los pedidos por todo Guayaquil. Han venido de otras provincias a probar el pollo”, aseguró Toño, quien además señaló que la clientela no llega por él, sino por el sabor de sus platos.

El restaurante, que lleva el apodo con el que se dio a conocer en las competencias, se inició en la venta de almuerzos y siempre estuvo bajo la administración de sus padres, ya que él estaba ocupado entrenando para ganar los retos en los realitys. Sin embargo, ha decidido relevar a sus padres y quedarse definitivamente en su restaurante, lo que no cambiaría por la televisión. Al menos no por el momento.