Con una carrera, caminata, charlas y otras actividades a realizarse este domingo en Quito, se promueve el beneficio de efectuar actividad física para tener una buena salud cardíaca.

Así, dentro de estas jornadas que forman parte del programa por el Día Mundial del Corazón (29 de septiembre), se informa cuán importante es ejercitarse continuamente.

Juan Carlos Gaibor, cardiólogo clínico e intervencionista del Hospital Metropolitano de Quito, y miembro de las Sociedades Ecuatoriana e Interamericana de Cardiología, sostuvo que la enfermedad cardiovascular causa cerca de 19 millones de muertes en el mundo y, en Ecuador, es el principal motivo de mortalidad.

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El especialista refiere que en los registros previos a la Covid-19 se refleja que cerca del 24% de defunciones se debieron a enfermedad cardiovascular, infarto agudo del corazón y accidente cerebro vascular.

Las encuestas del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) exponen que el 30 por ciento de la población adulta es sedentaria, es decir, no realiza actividad física y “lo más alarmante” es que cerca del 70% de niños tampoco cumplen con los requerimientos básicos de actividad física diaria, y por ello, según destaca el especialista, estamos teniendo esta nueva pandemia, la obesidad.

Otro dato que reflejan las estadísticas es que las niñas son más sedentarias en comparación a los niños. Precisamente, son los menores de edad quienes deben tener un mayor gasto energético que los adultos.

Según las recomendaciones de Organización Mundial de la Salud (OMS), unos 150 minutos de actividad física, de leve a moderada, por semana, le hará bien a su corazón.

Se entiende por ejercicio cualquier tipo de movimiento que motive un consumo de energía. Bien puede bailar, caminar o subir y bajar gradas.

Si los niños hacen actividades lúdicas también le sirven. Lo ideal es que se muevan en promedio de 20 minutos cada día.

Si ya realizan una actividad física de moderada a intensa, lo cual ya conlleva una práctica de algún deporte como el atletismo, el ciclismo o una combinación de estas, solo requiere ejercitarse unos 75 minutos a la semana. Así, por el bien de su corazón, procure moverse más.

La Sociedad de Cardiología recomienda sobre todo el ejercicio aeróbico, esto quiere decir, caminatas, atletismo, ciclismo, teniendo en cuenta de no extralimitarse.

¿Cómo comprueba que no está exagerando? Cuando está haciendo actividad física y puede mantener el aliento. Si se ejercita y aún puede sostener una conversación sin mostrarse tan cansado, está en el ritmo adecuado.

Según el especialista, es necesario que la gente que haga aeróbicos complemente la actividad con ejercicios de fuerza (los que hacen trabajar más los músculos, como sentadillas), al menos dos veces por semana, porque esto “nos ayuda para mantener un estatus hormonal adecuado y disminuir la probabilidad de que tengamos enfermedades como la osteoporosis”, acota Gaibor.

Más allá de los beneficios a nivel cardiovascular, la actividad física ayuda a disminuir la probabilidad de sufrir infartos, mejora el perfil del colesterol, de la glicemia, de azúcar en la sangre, disminuye la posibilidad de formar trombos en nuestras arterias, aumenta la vasodilatación.

El ejercitarnos también conlleva a disminuir el cáncer de colon, de mama, mejora nuestra parte cognitiva y también ayuda a nuestro estado de ánimo.

* ERROR COMÚN. Hacer actividad física explosiva, una vez por semana o de forma eventual ( jugadores de fútbol, de voley solo en fin de semana). Si tienen factores de riesgo, estas personas pueden presentar un infarto.

* CALENTAR Y ESTIRAR. Antes de hacer ejercicios intensos caliente el cuerpo y haga movimientos ligeros. Al terminar su jornada, haga una rutina de estiramiento para enfriarse y evitar contracturas, lesiones. No finalice los ejercicios de golpe.

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