Las reglas son parte del buen vivir. Sin ellas cada quien haría lo que le diera la gana y el resultado tendría un impacto negativo. Por ejemplo, todos tenemos o conocemos a un mal vecino. Aunque aquello es normal, seguramente este individuo no se acostumbró a seguir las consignas dadas en su infancia.

La educadora Mariuxi Montenegro, especializada en Argentina, indica que los padres deben darle cariño a sus hijos, pero al mismo tiempo poner límites e inculcarles respeto, disciplina y responsabilidad. Las reglas deben existir en todos los lugares a los que el niño acude con frecuencia. Si en su casa recoge la vajilla luego de comer, debe hacer lo mismo en la casa de los abuelitos.

Una buena opción para que el pequeño cumpla con las tareas es recurrir a tablas o cuadros que los ayuden a visualizar sus asignaciones. Allí se puede detallar cuando no cumple con sus tareas y cuando no lo hagan. Así es más sencillo de que entienda cuándo puede recibir una recompensa o un castigo.

“La forma más efectiva de disciplinar a los niños es ponerles atención. Para fomentar los buenos comportamientos y desalentar los malos”, dice Montenegro a DOMINGUERO.

Las claves

1. Las reglas de los juegos te pueden ayudar. En medio de la diversión estás poniendo límites. Es un momento socializador que enseña a los niños a ganar y perder, a respetar turnos y normas del juego.

2. Valida las emociones del niño. Hazlo sentir comprendido y respaldado aun cuando se haya cometido un incumplimiento de las reglas.

Toma nota

- Las reglas deben adaptarse a la edad del niño.

- La intención es fomentar la participación del pequeño.

- Deben ser claras y comprensivas por el niño.

- Si no cumple habrá una consigna o penitencia por realizar.

Importante

Los padres son el mejor ejemplo y espejo para los niños, por eso son los primeros que deben cumplir las reglas dadas.

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