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Gastronomía
Los guayacos gastarán el 50 % menos en sus cenas navideñas
Yo te lo pruebo salió a las calles de Guayaquil para consultar cuál será la ‘jama’ con la que celebrarán la Navidad. La mayoría habla de ahorro
Antes los ecuatorianos gastaban por lo menos 70 latas en los ingredientes de la cena navideña, hoy esperan ahorrarse un 50 %, esto debido a la crisis económica que se vive tras la pandemia de COVID-19. Así lo constatamos en un sondeo por las calles de Guayaquil. La mayoría busca alternativas que cuiden sus finanzas.
Andrés Ruiz, jubilado de la marina y cabeza de una familia de siete, asegura que este año comerá pollo. Su bolsillo no le permite darle el gusto al paladar con un pavo como solía hacerlo para estas fechas. “Ensaladita y arroz, lo que mi señora desee hacer, pero más del 50 % del dinero destinado para la cena bajó”, cuenta.
Lo dicho por Andrés coincide con las cifras obtenidas en una encuesta realizada por este medio a 754 lectores a través de Instagram, el 71 % respondió que decidió bajar su presupuesto; mientras que el 29 % aseguró mantenerlo.
Pablo Rosado, guayaquileño, cuenta que lo que resta del 2021 intentará moderar los gastos para que en su cena se puedan servir pierna de cerdo con ensalada, mote y ‘bielas’: “Estaremos 24 personas, siempre tomamos rompope para acompañar al chancho”.
“Me gustaría comerme un pollo rostizado y pasarlo bien con mi familia, somos 14”, expresa el Spiderman ‘guayaco’, quien no quiso revelar su verdadero nombre. El superhéroe criollo asegura sentirse cansado del pavo y, para disminuir gastos, el plato popular le parece una alternativa amigable con su bolsillo.
Además del ‘billuso’, la delincuencia y el temor de salir para buscar los productos de la cena, es otro factor que interfiere en la elección del preparación que se servirá en las mesas. Ángela Álava, guayaquileña, asegura que prefiere quedarse “en casa y pedir pollo rostizado o papipollo por la inseguridad que hay”.
Jenny Armendariz, gastrónoma y miembro de la Asociación de Chefs del Ecuador, explica a EXTRA que, con el tiempo, las cenas navideñas se han adaptado a la alacena y alcancía de cada familia. “Ahora podemos encontrar un menú variado que puede ser económico y hasta bajo en calorías para las personas ‘fit’”, añade.
No obstante, la popularidad del pavo no se pierde en las cocinas del país. Rosa Pinoargote y Laura Tenorio coinciden en que mantendrán la típica cena que se consume desde mediados del siglo XX tras la influencia estadounidense. “En mi casa mantengo el presupuesto porque siempre digo que cuando uno tiene en la mesa comida, el año va a ser con comida”, asegura Pinoargote.