Dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, esto está basado en la lealtad que estos seres ofrecen a la hora de conectar con su humano. Según un estudio realizado en el 2021, por la fundación PANA, en Guayaquil, hay más de 500.000 animales abandonados. Este jueves 21 de julio se conmemora el Día Mundial del Perro, queremos aprovechar la fecha para recalcar la importancia de la adopción de estos cariñosos peludos.

Esta situación ha obligado a que manos caritativas creen de a poco refugios y fundaciones con el objetivo es darle un hogar seguro, comida y una nueva vida, a estos pequeños seres que necesitan un hogar.

Para Fanny Merchán, quien es la persona que escribe las historias para el refugio @adoptameecuador y presta servicio a diferentes albergues de animales que necesitan ayuda, señala que adoptar es un acto de responsabilidad, que debe asumirse conscientemente "ya que la vida personal y familiar cambia porque llega un nuevo integrante a sumarse al grupo y esto requerirá tiempo, paciencia, recursos y sobre todo amor".

Ella y su esposo en el 2019 rescataron a Lola, una cachorra de al menos 6 o 7 meses de edad que vivía en condiciones precarias al sur de la ciudad. Al conocer su caso no dudaron en ayudarla, en un principio, su propósito era ser hogar temporal; es decir, cuidarla, sanar sus heridas y enfermedades para luego darla en adopción. Esto último nunca pasó porque ella supo cómo enamorarlos diariamente "con sus ojitos de cachorro".

Así como Fanny cambió la vida de su perrita Lola, lo hace a diario Denisse Caballero con su mascota. Ella es la presidenta de la Fundación ‘Yo amo animales’, desde muy pequeña tuvo mucho amor por los animales. El padre de Dennise también ama los animales y fue junto a él que poco a poco nació esta iniciativa por ayudar y crear una fundación para dar asistencia a más animales que están en una situación de abandono.

La fundación tiene más de 20 años y ha acogido a cerca de 2500 perros, para ‘Yo amo animales’, el compromiso de cuidado y responsabilidad que el posible adoptante tiene hacia los animales, es muy importante y vital a la hora de llenar una solicitud para la adopción.

NO SE TRATA DE ADOPTAR POR ADOPTAR

No es adoptar por adoptar, hay que tener en cuenta que se está adoptando una vida que ya sufrió una vez, como para volver a caer en malas manos. Actualmente la fundación 'Yo amo animales' está buscando un hogar definitivo para 10 perros.

La diferencia entre los animales que han sido abandonados y los que no han pasado por alguna necesidad es evidente, los perros abandonados pueden tener dolores físicos y también psicológicos por la carencia de afecto, brindarles un hogar seguro y tener paciencia por el periodo de adaptación es muy importante.

Según la veterinaria Lissette Demera este periodo va a variar de acuerdo al hogar donde vaya, se puede tener el espacio más grande, pero si no se tiene el tiempo para compartirlo con él, al perro le costará adaptarse a su nuevo hogar.

Un factor común en las personas que ayudan a los perros es la necesidad de ver un cambio en la vida de estos seres, y que tengan el hogar y salud que merecen, dice Carolina Mondragon, que es voluntaria en la fundación Alma Animal (@fundacion_almanimal). Ellos tienen a cargo 21 perritos que esperan ser adoptados por familias comprometidas al cuidado y respeto de las 5 libertades animales, como lo menciona la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE).

Las personas que quieren ser tutores de un animal, deben tener en cuenta estas 5 libertades:

-Libre de sed, hambre y desnutrición: proporcionar agua a disposición permanente y dotar de alimento adecuado para su edad.

-Libre de incomodidades físicas o térmicas: procurar que el ambiente del animal de compañía sea un sitio independiente con temperatura estable.

-Libre de dolor, lesiones o enfermedades: los tutores de un animal de compañía deben garantizar la prevención, cuidado, diagnóstico y tratamiento.

-Libre para expresar su comportamiento: los animales deben tener la oportunidad de expresarse naturalmente, sin restricciones.

-Libre de miedos y angustias: los animales no deben ser expuestos a situaciones de sufrimiento que provoquen su estrés, miedo o intimidación para desenvolverse.