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Buena Vida

Luego de un tiempo en silencio, el político decidió lanzarse para la Alcaldía de Quito.Andrés Páez

Andrés Páez: “Duermo con la conciencia tranquila”

Luego de permanecer un tiempo en silencio, el abogado y exasambleísta regresa a la lid política como candidato por la Alcaldía de Quito

Por sus venas corre sangre política. Su bisabuelo fue Ulpiano Páez, quien murió asesinado junto a Eloy Alfaro. Su abuelo, Lucio Tarquino Páez, llegó a ser alcalde de Ibarra y legislador, mientras que su tío Federico Páez Chiriboga ocupó la presidencia de la República.

Andrés Páez Benalcázar es un abogado que ha destacado también como sociólogo y asambleísta. Hoy aspira a convertirse en el nuevo alcalde de Quito.

Usted pudo haber sido vicepresidente de la República del Ecuador.

Bueno, fui elegido. Ganamos con Guillermo Lasso en 2017, pero el fraude fue monumental. No hay episodio más escandaloso en la historia del país que el de aquel año. Al mundo entero le consta que apagaron las máquinas durante 40 minutos y en ese lapso de tiempo montaron otro sistema con el que se dieron resultados totalmente diferentes.

Y en su vida, ¿cómo ha enfrentado los apagones?

Enfrentando los desafíos del futuro. Cuando ya los hechos estaban consumados volví a ejercer la abogacía y la sociología. Me tomé un respiro de la política y luego, con los acontecimientos, me ha tocado retomarla.

Extrañaba verlo dando guerra.

Pasé a un honroso retiro pero, como le digo, debido a las circunstancias, me he visto obligado a retomar mi auténtica vocación. Y aquí estamos para enfrentar el desafío de la Alcaldía de Quito. La ciudad está abandonada y no podemos permitir que siga así si cae en las manos equivocadas. Podría estar tranquilo en mi casa llevando una vida normal, pero decidí asumir el riesgo y el reto de dar una opción digna, distinta y propositiva, con auténticos contenidos de propuesta.

Entonces sí sabe cómo hacerlo.

Por supuesto y la experiencia pesa muchísimo.

Quito es la ciudad de sus amores, pero usted nació en Ibarra, ‘la ciudad blanca’. ¿Su alma es también así de blanca?

El alma sí, por supuesto. Mi gran secreto para dormir es que cuando me acuesto sé que Dios mira mi corazón y duermo con la conciencia tranquila. Nací en Ibarra, pero vine muy pequeño a Quito. Tenía cinco años cuando llegué a vivir a la calle Caracas # 157 en San Juan.

¿Lo más urgente?

Defender a las víctimas de la delincuencia, tener una Policía Municipal que sea un órgano auxiliar de la Policía Nacional en la lucha contra el hampa... y no que ande persiguiendo a vendedores ambulantes, de hecho no permitiré que eso suceda. Esa es la más urgente de las prioridades.

Habrá que pedirle permiso para protestar siendo alcalde.

De acuerdo con la ley, toda persona para utilizar el espacio público debe obtener un permiso y se lo daremos. El señor Iza tendrá su permiso con sus respectivas garantías, pero si confunde protesta con vandalismo se verá conmigo y le aplicaré todo el peso de la ley, porque ahora sí Quito tendrá una autoridad, un liderazgo sin ambages ni posiciones ambivalentes. Los servicios de salud y la lucha contra la desnutrición infantil también serán prioridad.

¿Y usted de qué se nutre?

De la lectura, soy un ratón de biblioteca. Tengo cuatro mil libros. Luego le sigue la jardinería, he sembrado más de 300 árboles y están ahí.

¿Es de los que hablan con las plantas?

Hablo en silencio con ellas, pero no me dedico a abrazar árboles para justificar la vagancia (risas). También soy rescatista animal. Tengo once perritos y tres gatos rescatados.

Hablando de eso, ¿a qué políticos rescataría?

Hay gente todavía valiosa en el país, puedo nombrar a Rodrigo Borja Cevallos, Aquiles Rigaíl, Medardo Mora Solórzano, Xavier Muñoz Chávez, Enrique Ayala Mora, Simón Espinosa, Ramiro Rivera, quienes son parte de la reserva moral del país. Algunos de ellos ya están en el retiro, pero hay que acudir a ellos.

Y en vez de rescatar, ¿a quiénes lanzaría a una quebrada?

A todos los de la ‘década perdida’ sin excepción.

¿Qué más lo mueve aparte de la política?

Soy deportista. Hincha del Deportivo Quito y de la Tri. También me mueve la fe católica.

"Mi gran secreto para dormir es que cuando me acuesto sé que Dios mira mi corazón y duermo con la conciencia tranquila".

¿Devoto de algún santo?

Como buen salesiano, de Don Bosco y de María Auxiliadora y de la Virgen del Quinche y de la Virgen Dolorosa.

Y como buen católico, ¿perdona a sus enemigos?

A muchos de ellos... El perdón es divino. Le corresponde a Dios y como ser humano no es bueno llevar esas cargas. Hay gente que me ha hecho daño, pero con el tiempo me libero de esas cargas y viene el alivio.

¿Y su mochila cómo está ahora?

En cuanto a afectos, muy cargada; en cuanto a deseos de venganza, prácticamente vacía.

Fuera de la política, me dicen que usted es un hombre bohemio, pero es alérgico al vino.

No es que me guste la bohemia, me agrada la buena música, pero desarrollé alergia al vino a los 20 años y no he vuelto a probarlo. Con el tiempo desarrollé otra que es al chancho, algo muy extraño. Me cuido mucho en las comidas.

Pero a un buen ‘whiskacho’ no le dice que no.

No, cuando hay buena música y buenos amigos, como cualquier persona. Lo que no me gusta es embriagarme, pero un ceviche con una buena cerveza, ¡imagínese!

No me diga que jamás se le ha borrado el casete.

Sí, claro, como a todos.

¿Cuándo fue la última vez, aquella que ‘amaneció en Las Vegas’?

(Risas) No creo que en Las Vegas, pero debe haber sido por el año 2009, cuando volvimos a ser campeones con el Deportivo Quito. Esa fue una fiesta muy prolongada.

¿Con qué personaje de la historia se amanecería en un entorno similar?

Con Winston Churchill, un personaje al que admiro, o con Nelson Mandela o Francois Mitterrand.

Ping pong

¿Qué lo envuelve?

La música nacional.

¿Qué ritmos?

El pasillo, el pasacalle y el albazo.

¿Baila?

Soy muy bueno para la cumbia y la salsa.

¿Y reguetón?

Esas habilidades ya no.

¿El Chavo del Ocho?

Una de mis series favoritas. Crecimos con el Chavo y toda la magia de Roberto Gómez Bolaños.

¿Y por qué le decían Quico?

Por lo cachetoncito, así he sido desde niño, pero no me disgusta, me río. Compré un año viejo de Quico hace tiempo y me tomé una foto.

  • En pocas palabras

Jorge Yunda: Comunicador.

Luz Elena Coloma:
Periodista.

Pedro Freile:
Abogado.

Rodrigo Borja:
 Estadista.

Rafael Correa: Mafioso.

Jorge Glas: Ladrón consuetudinario.

Leonidas Iza: Terrorista.

Andrés Páez: Futuro alcalde de Quito.