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Tiguerones, Fatales y Lobos: estas bandas en Ecuador se dividieron, ¿cómo afecta?

Organizaciones criminales tienen disputas internas y se fraccionan. Una de las consecuencias es la proliferación de grupos delictivos

Asesinan a policía en la cooperativa Balerio Estacio
El 4 de julio, un policía fue asesinado en la cooperativa Balerio Estacio. El crimen se atribuyó a Los Tiguerones.Foto: EXTRA

Así como cortar una torta con un cuchillo, las bandas criminales se dividen y una parte de sus integrantes se abre para delinquir por su lado. Estas separaciones ocasionan una serie de efectos que, en vez de reducir el poder delictivo, hacen que sea más difícil enfrentarlo.

Dos casos se registraron en el distrito Nueva Prosperina, en el noroeste de Guayaquil. En esa extensa área de la ciudad, que abarca populosos sectores como Flor de Bastión y Monte Sinaí, Los Tiguerones están divididos. Unos son Los Tiguerones Fénix y los otros Los Tiguerones Igualitos.

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El teniente coronel Roberto Santamaría, jefe policial en aquel distrito, explica que estas rupturas siempre nacen de un hecho que motiva desunión. Y eso fue lo que pasó con Los Tiguerones en esa zona de la urbe.

El hecho disparador fue la incursión de la banda Mafia 18 (en Nueva Prosperina). Mientras una parte de Los Tiguerones les dio cabida dentro de este territorio, otra no estuvo de acuerdo”, indica.

El fraccionamiento empezó a inicios de este año. La facción Igualitos fue la que ayudó a Mafia 18. Los Fénix, de mayor presencia en ese distrito, se mostraron en contra de eso. Estos desacuerdos provocaron que en las últimas dos semanas ocurrieran crímenes entre los bandos en conflicto.

Según datos policiales, en Nueva Prosperina, un sujeto conocido como alias Ozuna habría pasado de Los Tiguerones a Mafia 18, generando pugnas.

En Nueva Prosperina, otra agrupación fraccionada por disputas es Los Fatales. De ellos surgió un bando conocido como Fatales Sanguinarios. Recientemente, el viernes 30 de agosto de 2024, un adulto y dos menores de edad que pertenecerían a esa facción fueron detenidos como sospechosos de intentar asaltar un bus. Tenían consigo un revólver, municiones y un cuchillo.

El hombre, identificado como Darwin Ramón Vera Quiroz, fue procesado por tenencia y porte de armas. En la espalda, debajo del hombro derecho, tiene el mismo tatuaje que los adolescentes: una máscara como la de Jason, el personaje de la saga de películas de terror ‘Viernes 13’. Detrás de la máscara hay dibujos de hachas y machetes. Al parecer, ese tatuaje los distingue de la banda.

Según Santamaría, los grupos delictivos que llegan a ser tan grandes después ya no pueden autorregularse. Eso hace que ya no sean encabezados por una sola persona, sino por varias, facilitando posibles divisiones.

Fatales Sanguinarios
El adulto y los adolescentes tenían el mismo tatuaje.Foto: EXTRA

Proliferación de bandas, uno de los efectos

Mario Pazmiño, consultor en temas de inteligencia, seguridad y defensa, explica que este fenómeno hace que las agrupaciones criminales aumenten, dificultando que la Policía las pueda identificar. También genera que se amplíen las zonas bajo el dominio delictivo.

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El fraccionamiento se genera especialmente porque hay ambiciones personales dentro de las estructuras. Se conforman diferentes grupos y cada uno quiere tomar el control de la banda, o pueden independizarse”, señala.

Acota que al haber una mayor cantidad de bandas, las labores policiales para enfrentar la situación se tornan complejas. “Eso implica que habrá más enfrentamientos entre estas organizaciones, porque cada una de ellas quiere un espacio en donde poder ejercer el control”, advierte.

En su análisis, Pazmiño comenta que las bandas no disminuyen su poder al tener estas separaciones. Lo que sucede es que continúan fortaleciéndose para no perder control, mientras quienes se independizan también van adquiriendo poder.

Como ejemplo, cita lo que ocurrió con Los Choneros, de cuyas entrañas luego se desprendieron otras organizaciones. Actualmente, ni los unos ni los otros han disminuido sus estructuras, sino que mayoritariamente las han apuntalado.

Es necesario pasar de lo reactivo a lo preventivo

Daniel Pontón, experto en seguridad y catedrático del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), señala que las separaciones también causan una pelea por manejar los delitos más lucrativos. Se convierte en una lucha en la que prevalece el más fuerte.

Operativo Nueva Prosperina
En Nueva Prosperina realizan operativos para frenar a las bandas.Foto: EXTRA

“A eso hay que sumar que cada subgrupo trae nuevos delitos y mutaciones de delitos, porque el delito es dinámico”, expresa.

Opina que la Policía tiene una visión de reaccionar ante los hechos delictivos que ocurren. Pero para que el trabajo institucional esté orientado a la prevención, es necesario entender el fenómeno desde otro enfoque. “Jugar a la zaga de cómo se subdividen estos grupos para generar especialidades policiales, o atenciones especiales diferenciadas por grupos, me parece que es siempre jugar a la retaguardia, o con un paso atrás”, argumenta.

En su opinión, hay que aplicar estrategias más anticipativas. Y eso va de la mano con entender cuáles son los factores en común establecidos entre los grupos criminales, como las armas, los mercados ilícitos y la impunidad.

Menciona que entre las bandas es probable que haya fraccionamientos, pero ante eso habría que preguntarse también cómo la estrategia del Estado genera esas divisiones.

“A veces, por sacar información de un lugar para debilitar a otro, terminan privilegiando a otro tipo de grupo criminal. Ese es un juego macabro en el que el Estado cae fácilmente. En Colombia, por ejemplo, el fraccionamiento de los grupos narcotraficantes minimizó el riesgo de que sean capturados”, complementa.

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Por su parte, Pazmiño apunta a que se debe mejorar el sistema de inteligencia, de manera que puedan detectarse posibles amenazas. También explica que debe haber presencia permanente en los territorios, no solo en las áreas urbanas, sino en las rurales y en las carreteras.

“Eso va a cambiar la dinámica del crimen organizado y va a generar mayor estabilidad en el desarrollo de las actividades de la sociedad”, recalca. Adicionalmente, considera vital que en el sistema educativo se pueda evitar que los estudiantes sean captados por la delincuencia

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