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Jubilados y pensionistas protestan frente al Hospital del IESS de Riobamba, exigiendo mejoras en la atención y en los suministros médicosCortesía

Protestas en el hospital del IESS de Riobamba por falta de insumos y mala atención

En la casa de salud demandan mejoras urgentes en atención y suministros médicos

Por Patricia Oleas

18 de julio, 2024

Grupos de jubilados y pensionistas del Instituto de Seguridad Social de Chimborazo protagonizaron una protesta en las afueras del Hospital del IESS de Riobamba.

"Queremos atención profesional, insumos", decían las pancartas. Por breves minutos, se tomaron la calle, interrumpiendo el tráfico.

"No puede ser que hayamos entregado toda una vida de trabajo, nuestros aportes, y ahora no exista nada. Cada vez está peor. No hay turnos, especialistas, ni qué decir de medicina e insumos", dijo una de las manifestantes que prefirió omitir su nombre.

A este grupo se unieron médicos, enfermeras y trabajadores, quienes también expresaron su malestar por la gran carestía que atraviesa esta institución. Las pancartas contra la corrupción, la fiscalización de las compras públicas y la mala administración también fueron parte de la denuncia.

Médicos y trabajadores del Hospital del IESS de Riobamba se unen a la protesta por la escasez de recursos y la mala gestión de la institución/ Cortesía

Minutos más tarde, personal manifestó que, por disposición de la jefatura de Talento Humano, se les ordenó a todo el personal, inclusive a quienes estaban en quirófano, que se acercaran a timbrar para corroborar que se encontraban laborando. Esto como medida para que pudieran apoyar a sus compañeros que decidieron protestar.

"Tenemos represalias, ¿a qué nos vamos a enfrentar? Pero ya no es justo. Los pacientes no aguantan más; existen casos que ya no tienen para seguir comprando las recetas", explicaron.

Después, el supervisor de los guardias prohibió el ingreso a la prensa. "Nosotros recibimos órdenes. Solo cumplimos con nuestro trabajo", manifestó. Hasta el momento, ninguna autoridad ha emitido ninguna declaración.

María Lema, una de las aseguradas, indicó que los turnos son muy difíciles de conseguir. "Han pasado meses, que no hay, que ya está llena la agenda y cuando por fin me dan, no existen medicamentos. Me toca comprarlos. Igual, una vecina dijo que trajo a su hijo por emergencia y le pidieron que compre un montón de cosas. No hay nada. La atención, y eso cuando tienen buena gana, sino hasta mala cara ponen los señores. Antes, no son todos", afirmó.

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