Desde la noche del 18 de enero de 2021, el auto de Wilson Córdova es una especie de sala de espera. En compañía de su esposa Jéssica Avilés, él está a la expectativa de alguna respuesta sobre la salud de su madre, Ángela Caice, quien ese día fue asilada de urgencia en el Hospital Bicentenario con síntomas de COVID-19.

La pareja decidió traer a la adulta mayor desde Mocache, cantón de Los Ríos, situado a 157 kilómetros de Guayaquil, al comprobar que no mejoraba su salud.

“Los exámenes determinaron que mi padre es asintomático, por lo que permanece en cuarentena”, contó Córdova.

Luego comentó que, en cambio, su progenitora había permanecido cinco días en una clínica de Quevedo, pero decidieron trasladarla a la capital del Guayas  al no ver ninguna mejoría en ella.

Con la vista en Guayaquil

Hay otras familias que han decidido traer a sus pacientes con la esperanza de que en Guayaquil logren vencer al virus, pues dicen que donde viven no hay las condiciones para tratar a enfermos graves.

Familiares de Delia Moreno (78) llegaron hace dos semanas procedentes de Marcelino Maridueña, cantón del centro del Guayas. Su hijo, Víctor Meneses, indica que a su mamá solo la han visto en dos ocasiones, cuando la han llevado a efectuar tomografías de los pulmones.

Admite que le “partió el alma” ver que iba conectada a un tanque de oxígeno. “Gracias a Dios, mi madre está algo ‘mejorcita’. Tenemos fe en que saldrá bien”, expresó.

Por ahora, hijos y nietos de doña Delia se turnan en los exteriores del área de triaje de la casa asistencial, en espera de alguna respuesta de los médicos.

Mientras que familiares de Genoveva Rivas, de 63 años, la trajeron ayer desde Daule para que se realice una prueba. “Llegó con síntomas de COVID. Espero que no se trate del mal, aunque por momentos le costaba respirar”, señaló su hija Belén Parrales. 

Mano dura a los tumultos

Un trabajo en conjunto despliegan policías, municipales y personal de salud para desbaratar las concentraciones masivas en Guayaquil, medida con la que se busca frenar los contagios de COVID-19. La tarea se complementa con la desinfección, usando dióxido de cloro.

Después de Quito, la Perla del Pacífico es la ciudad con más contagios en el país. La urbe registra un promedio de 14 fallecidos de COVID por día.

Los principales puntos intervenidos del norte de Guayaquil son: Socio Vivienda, Vergeles, Samanes, Urdesa y Alborada; mientras que en el sur son Guasmo Norte y Fertisa.

De acuerdo con el ECU-911, desde octubre pasado se han receptado 7.980 alertas por denuncias de fiestas clandestinas y aglomeraciones.