Las críticas hacia la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM) han sido una constante en Guayaquil en los últimos años. Los videos que muestran a los agentes discutiendo o enfrentándose a golpes con los ciudadanos ya no son novedad en las redes sociales, y las denuncias sobre pedidos de coimas por parte de los agentes se escuchan casi a diario en las calles. A esto se suman las críticas por la desaparición de los uniformados después de las 18:00, como ha reportado EXTRA.

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“Estamos hartos, el papel que cumple la entidad es deplorable”, opina Orlando Calderón, un conductor guayaquileño, quien asegura que el tráfico que se vive en la ciudad “se debe en gran parte a que el personal nunca está en las calles, al menos no cuando debe”. 

Esta opinión es compartida por decenas de guayaquileños, según los resultados de la encuesta realizada por el colectivo ‘Guayaquil Cómo Vamos’ y otras instituciones del país, la cual revela que el 66% de los encuestados se siente “nada satisfecho” o “poco satisfecho” con el trabajo de la institución. Apenas un 5% dijo estar “muy satisfecho”.

Para Daniela Gómez Lince, conductora guayaquileña, uno de los principales reclamos de los ciudadanos hacia la ATM es su ausencia. “Solo trabajan hasta las 18:00 y luego no se los ve más. En la noche también hay tráfico y accidentes. Deberían trabajar a toda hora. Por eso estamos como estamos”, critica la residente de la ciudadela la Alborada, quien enfoca su crítica en los rangos más altos de la ATM, no en los agentes. “Solo deben ponerlos a trabajar, la culpa no es de los vigilantes, sino de quienes están más arriba”, opina.

EXTRA ha preguntado repetidamente a la autoridad sobre la falta de agentes en las noches, pero no ha recibido una explicación. Las críticas también suelen estar relacionadas con la presunta corrupción en las calles. Más del 50% de los encuestados considera que la corrupción sigue igual que en años anteriores, el 26% cree que ha aumentado, y apenas el 22% opina que ha disminuido o que no existe.

Luiz Izquierdo, un taxista guayaquileño, sostiene que es “muy fácil entrar a la ATM”, lo que permite la entrada de más funcionarios públicos corruptos. “Ante la necesidad de vigilantes, escogen a cualquiera. Haces un curso y en pocos meses ya están en las calles siendo autoridad. Eso hace que sea muy fácil entrar y no está bien”, comenta el conductor, quien ha sido víctima de lo que él llama “vacunas”. 

“Buscan cualquier excusa para multarte y, como saben que las multas son muy caras, esperan que les des dinero. ¿Cómo podemos estar conformes con ellos? Y ni hablar de los radares”, añade, confesando que ha pagado para “salir librado”.

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La encuesta también abordó el mal accionar de los ciudadanos, como pagar dinero para acelerar trámites. El 69% de los consultados desaprueba esta acción, mientras que un 19% la justifica “poco”. Apenas un 11% opina que se justifica “algo y mucho”.

Porcentajes similares se reflejan en la consulta sobre el uso del carril de servicio de la Metrovía en caso de apuro. El 57% no lo justifica de ninguna forma, y un 25% lo justifica poco. Sin embargo, muchos ciudadanos se quejan de que son los mismos agentes quienes les indican transitar por ahí, para luego ser multados por las cámaras, como explica Ariel Constante, quien menciona que estos casos se repiten en las “horas pico”.

El alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, ha señalado que la inclusión de cámaras sancionadoras busca evitar el contacto constante entre conductores y agentes. Sin embargo, la ciudadanía también denuncia otra irregularidad: “las multas fantasmas”.

“Los benditos radares, siempre mal calibrados, han sido un dolor de cabeza. La ATM, como otras agencias de tránsito en el país, nos ha metido la mano de manera descarada. ¿Y quién ha respondido? Nadie. Nunca”, subraya el conductor Timoteo León.

La ciudadanía ha hecho un llamado a las autoridades superiores del Municipio de Guayaquil. “No solo hace falta que los agentes mejoren, sino toda la institución. Se debe hacer una reestructuración completa para que solo queden los buenos funcionarios. Que esto empiece desde el Cabildo”, dijo Alberto Sierra, empresario ecuatoriano.

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