Los parientes de Alfredo Pilicita, su esposa Monserrate Aranea y Alexander Pilicita (hijo de la pareja) los velaron en silencio en la sala de un hotel en Machachi, capital del cantón Mejía. Con tristeza miraban los féretros acomodados uno junto al otro, en la parte delantera del espacio funerario.

(Te invitamos a leer: Verónica Briones, pareja de Fito, busca su libertad: Detalles de su solicitud al juez)

El altar con los ataúdes fue levantado un día después de la cruel matanza de las tres víctimas en el cantón Pedro Carbo, en la provincia de Guayas. Sucedió la noche del domingo 1 de septiembre, cuando un sujeto armado llegó al local de venta de víveres de la familia, ubicado en las calles 9 de Octubre y Juan Montalvo.

“No sabemos qué es lo que realmente sucedió, pero parece que todo ocurrió porque les querían cobrar ‘vacunas’ (extorsión)”, detalló Manuel Montatixe, cuñado de Alfredo Pilicita. Esta hipótesis corroboró lo que dijo la Policía durante el ataque, registrado cerca de las 21:00.

Montatixe contó que él y su familia estaban descansando cuando recibieron una llamada para contarles de la mala noticia. “Mis parientes se organizaron y viajaron en avión hasta Guayaquil y después se dirigieron hasta la morgue de Daule”, acotó el pariente.

Luego de los trámites, los seres queridos de las víctimas los velaron unas cuantas horas en Pedro Carbo y luego emprendieron el largo viaje hasta Machachi, de donde era oriundo Pilicita.

Conozca también sobre este tema: Lo que se sabe de un triple crimen en el cantón Pedro Carbo

“La familia decidió ponerse una tienda en ese cantón. Les iba bien y por eso hicieron su vida allá hace poco más de 20 años”, acotó Montatixe afuera de la sala de velación.

Pilicita era economista de profesión mientras que su esposa era ingeniera y sus raíces eran de Pedro Carbo. El muchacho asesinado era tecnólogo y el menor de tres hijos que tuvo esta pareja.

“Los otros dos hijos se salvaron porque estaban en otra casa”, reveló el allegado a los asesinados, quienes eran muy conocidos en el cantón. El cariño que les tenían las personas se expresó en un pequeño acto afuera de la tienda donde quedaron los cadáveres.

Las personas colocaron velas en honor a sus vecinos y también un arreglo floral. Luego se sentaron para dedicarles unas palabras ante el hecho que conmocionó a Pedro Carbo y a Mejía.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!