Los periodistas Sigifredo Quiñónez y Andrés Durán, acusados por la prefecta de Esmeraldas, Roberta Zambrano, de provocar la ola de violencia que se vive en la provincia verde, temen por su vida y la de su familia, pero afirman que continuarán trabajando en búsqueda de la verdad.

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El comunicador Quiñónez, creador de contenido y dueño de un medio digital, fue acusado por la funcionaria de tener nexos con bandas delictivas e incitar al odio contra el Gobierno Provincial a través de su plataforma.

Durante una rueda de prensa, Zambrano dijo que Quiñónez, al parecer, tiene contacto directo con los delincuentes.

Y para probar ello reprodujo un audio en el que el comunicador dice que ha llamado a las personas que están asesinando a trabajadores inocentes de la Prefectura. “Si usted habla con ellos, por qué no ayuda a decirle a la Policía quiénes son y dónde están, por qué no le ayuda al pueblo de Esmeraldas para que no haya más sangre”.

Según Quiñónez, con sus declaraciones y acusaciones, la prefecta lo lanzó a la palestra pública para que lo maten.

Afirma que ella es quien sí tenía contacto con el líder o los miembros de la banda que la estaría extorsionando. “Ella actuó con maldad, me entregó a las fuerzas públicas para que me investiguen. Mis hijas han llorado”.

Quiñónez también afirma que Zambrano lo habría amenazado con meterlo preso.

Investigación reveladora

Por su parte, el periodista e investigador Andrés Durán fue señalado por Zambrano de que los ataques y asesinatos con trasfondo extorsivo que estarían ocurriendo en la Prefectura de la provincia son por un reportaje que él publicó, en el cual se informa sobre una supuesta fortuna que tiene la funcionaria.

Ante esto, Durán señala que denunció con documentos públicos las presuntas irregularidades en las declaraciones juramentadas del patrimonio de Zambrano. El periodista enfatiza que dicha información es pública y cuestiona cómo el patrimonio de la servidora pública ha cambiado notablemente entre el 2017 y 2023. “Tiene más de 2’300.000 dólares”.

Durán añade que en agosto del 2023 se contactó con Zambrano para recopilar su versión y cotejar la información que reposa en la plataforma digital de la Contraloría General del Estado, pero “se negó a darme una versión”.

Según el investigador no se comprende cómo la prefecta puede tener propiedades de miles de dólares cuando se conoce que su salario es de 5 ‘lucas’ mensuales. “Tiene propiedades en Pichincha, Manabí y Esmeraldas”.

Por otro lado, Durán enfatiza que nunca relacionó a Zambrano con el crimen organizado que opera en Esmeraldas.

Ambos comunicadores responsabilizan a la prefecta de que si llegara a pasar algo con su integridad o la de su familia deben investigarla a ella. Además, aseguran que continuarán con su labor apoyados en la libertad de expresión. 

Trabajadores piden teletrabajo 

Las actividades laborales fueron casi nulas el 15 de noviembre en las oficinas de la Prefectura de Esmeraldas. Esto mientras se analiza la implementación de teletrabajo para proteger la vida de los colaboradores, quienes se resisten a ir a trabajar de forma presencial por temor a ser asesinados o blanco de algún atentado.

Hasta la fecha se han registrado siete atentados en contra de los trabajadores. El último fue el asesinato de Raúl Quintero Ayoví, quien fue baleado afuera de su casa.

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