Destrozada, bañada en lágrimas y contrariada, así se mostraba Martha Flores, esposa de Orlando Chóez Mendoza, el guardia que fue asesinado en el interior de una celda, en la cárcel El Rodeo de Portoviejo, provincia de Manabí.

La mujer, en las afueras de la morgue de Manta, mientras esperaba el retiro del cadáver, el jueves 10 de diciembre de 2020, pedía entre sollozos justicia por el fallecimiento de su esposo.

“En la audiencia nos dijeron que iba a la cárcel de Jipijapa, pero luego, el martes, lo trasladaron a la de El Rodeo. Allí lo iban a poner en cuarentena, pero nada fue así”, lamentó.

Orlando Chóez Chong, padre del fallecido, exclamó por respuestas a las autoridades, pues considera que lo sucedido en el centro de reclusión fue planificado.

Fausto Buenaño, jefe policial de Manabí, indicó que Chóez era hermano del supuesto jefe de la banda que lideró el atraco, quien está prófugo.

Katherine Santos, directora de El Rodeo, manifestó que lo sucedido con el guardia se generó durante un juego de azar entre los privados de libertad, donde, según los videos, muestran que presuntamente el fallecido inició el altercado y los otros reos se defendieron.

Chóez estaba detenido para investigaciones por el robo de 200 mil dólares a un blindado. (AG)