Un agujero de bala quedó como recordatorio del crimen de un padre y su hijo en la puerta de su casa, ubicada en la calle S38 de la Ciudadela Ibarra, sur de Quito. La madrugada del 14 de julio la familia llegaba de un compromiso social, cuando un auto con cuatro sujetos los interceptó para robarles. El hecho se conoció este lunes 22 de julio por redes sociales.

(Lee además: Padre e hijo fueron asesinados en la Ciudadela Ibarra en medio de un violento robo en Quito)

Ocho días después, la policía organizó un operativo de revisión de vehículos en esa misma calle. Los vecinos no lo recibieron bien, pues reclaman que se sienten abandonados ante la delincuencia.

“Después de ocho días no nos sirve. No solo tienen que venir cuando están las cámaras”, reclamaba una vecina desde su ventana.

En un video captado por una cámara de seguridad se puede ver cómo las víctimas forcejean, dos de ellas: el padre y el hijo caen al piso.

Según Alejandro Yánez, jefe de Operaciones subrogante del Distrito Quitumbe, informó que el padre de 65 años murió con dos impactos de bala, mientras que el joven, de 30 años, no tenía signos de violencia. Sin embargo, en la grabación se puede ver que cae al piso en medio del forcejeo.

Ninguno de los moradores quiso decir su nombre por medio a represalias. “Desde que pasó eso con los vecinos no hemos podido estar en paz. Ellos no le hacían daño a nadie”, dijo una moradora.

La mujer, quien estaba con las víctimas, habría logrado esquivar las balas, pero ya no se la ve en su casa, según los vecinos. “Sabemos que ahora está en casa de familiares. Se quedó solita”, lamenta otra moradora.

Frente al miedo, han tomado algunas medidas: cerrar el paso de ventanas y puertas, tampoco salir pasadas las 19:00. EXTRA evidenció los trabajos en una casa. “También se están metiendo en las viviendas. No podemos seguir así”, reclamó la dueña.

Otro morador dijo estar evaluando la posibilidad de irse del barrio, debido a la creciente inseguridad, percepción que dista de las cifras de Yánez, quien informó que este año se han registrado 32 muertes violentas en la zona, 12 menos que el año pasado.

¿Quieres leer sin límites? ¡Suscríbete!