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Grenny Pacheco continúa con la tradición de su progenitora, como es la siembra de la hierba luisa..Tatiana Ortiz / EXTRA

Un aroma que cura

Una infusión de la hierba luisa contrarresta problemas digestivos y respiratorios. La planta es una de las preferidas en esta época de coronavirus.

En un macetero de plástico, Grenny Pacheco atesora una de las plantas medicinales más completas que tiene en el patio de su casa, ubicada en la ciudadela Puertas Negras, en Babahoyo (Los Ríos). Se trata de la hierba luisa, originaria de Sudamérica.

Su uso en la medicina ancestral permitió descubrir las propiedades que posee la planta. Y en tiempos de pandemia, su consumo fue recurrente gracias al efecto expectorante y antioxidante que posee.

Según Grenny, desde que tiene uso de razón, la hierba luisa ha estado presente en la mesa de su familia, oriunda de la parroquia La Unión, en la capital fluminense.

“Mi mamá nos hacía gloriados de hierba luisa antes de irnos a la escuela. Esa misma infusión, mezclada con eucalipto, también nos la daba cuando teníamos gripe y era un santo remedio con efecto inmediato”, agregó la mujer de 57 años.

De ahí que su fe en los poderes curativos de la planta, la hizo empezar a cultivarla para consumo propio y el de su familia. Si una mata se le marchita, busca algún ‘hijito’ de otra y la pone a germinar hasta obtener una planta robusta de abundante hojas.

Una mata de hierba luisa puede alcanzar el metro y medio de alto. Sus hojas tienen propiedades antiespasmódicas, contra vértigos y migrañas, tónicas estomacales y carminativas; pero es la más recomendada por naturistas para prevenir el insomnio.

De tres a cuatro hojas son suficientes para preparar medio litro de agua aromática. Luego de lavarse, se forma un nudo con las misma hierba y la agregan después del primer hervor. Se cubre el recipiente con tapa, hasta después de unos minutos que la planta desprende su olor, aroma y color.

Un gloriado de la planta alivia varias enfermedades, entre ellas digestivas y respiratorias, según los naturistas.Tatiana Ortiz / EXTRA

La naturista Alba Villota refirió que en su conocimiento básico de las propiedades naturales de las plantas, descubrió que la hierba luisa fortalece el sistema nervioso. Por ello era empleada en el siglo XVIII para reanimar a las personas decaídas físicamente.

Villota mencionó además que las hojas de hierba luisa también se las emplea en baños de florecimiento, gracias a los beneficios energéticos que le brinda al cuerpo, junto con otras plantas medicinales.

“Hay evidencia científica de cómo sus propiedades inciden en las personas. Yo la tengo en casa y siempre estamos tomando infusiones para prevenir los ataques de agentes externos a nuestra salud”, señaló.

El doctor Arnoldo Romero dijo que el uso de las plantas es opcional de acuerdo a las creencias de cada persona. Sin embargo, recalcó que estudios han comprobado que la hierba luisa contiene limoneno y cariofileno ayudan a disminuir las flatulencias.

“He leído que el citral, otro de sus componentes, ayuda a mejorar el sistema inmunitario que aumenta la producción de glóbulos blancos”, destacó el profesional.

En algunos países de América del Sur suelen confundir a la hierba luisa con el cedrón, que es una mata con similares beneficios, pero de diferente aspecto.