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Accidente aéreo en Santa Elena: Así fue la llegada de los féretros a la capilla ardiente
Los restos de los capitanes arribaron a las instalaciones de la Aviación Naval pasadas las 18:00 del martes 7. Sus familiares se despidieron con discursos
El discurso de la hija del capitán Wilson Bohórquez, fallecido en el accidente aéreo de la tarde del lunes 6 de mayo al sur de la provincia de Santa Elena, fue cerrado con el despegue de un avión. Casi de manera cronometrada, una aeronave comercial arrancó mientras la joven 'despedía' a su padre en un sentido relato que ofreció en la capilla ardiente realizada en las instalaciones de la Aviación Naval, al norte de Guayaquil.
El acto solemne se llevó a cabo desde las 18:10, cuando los féretros que contenían los restos de las dos víctimas del siniestro arribaron a la pista de la Aviación, luego de registrarse un retraso en su llegada debido a contratiempos en la identificación de los cuerpos por parte de Criminalística, en la ciudad de Salinas, localidad cercana al sitio del accidente.
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A partir de su aterrizaje, una calle de honor fue instalada para que los cuerpos sean movidos hasta el espacio designado en la capilla ardiente, donde ya se encontraban familiares cercanos, allegados, compañeros de labores y altos mandos militares rindiendo honores a los oficiales que perecieron en tareas.
Luego, un alto mando de la Armada Nacional intervino en el momento solemne y pidió que se honrara a los capitanes fallecidos con un minuto de silencio.
Palabras de despedida a víctimas del accidente aéreo
Posteriormente, familiares de los oficiales, entre ellos la hija del capitán Bohórquez, expusieron su tristeza ante los presentes. En este espacio, la joven comentó que su padre la había llevado hasta su lugar de estudios en la mañana de ayer. "Yo sabía que debía prepararme para un momento así, pero no pensé que llegaría tan pronto", dijo.
Al finalizar su intervención, ella corrió a abrazarse a otra mujer y lloraron ante el momento de dolor. A ella le siguió el hermano del capitán Jean Ramírez, quien también es parte de la Marina, en la división de los buques.
El hombre dijo que había perdido a quien lo veía como un hijo y no como un hermano ya que lo cuidó mucho desde que eran niños. Él, además, comentó que su padre también había sido parte de la Armada y que él sentía una gran carga al quedarse solo en la institución.
Finalmente, a través del mismo micrófono, se comunicó que los cuerpos serían velados hasta las 08:30 del miércoles 8 de mayo y que a partir de esa hora se realizaría una misa; luego, serán trasladados hasta el camposanto Parques de la Paz, en La Aurora, para su sepultura.
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