Los fuertes temporales que han azotado la región andina de Ecuador desde el pasado fin de semana han causado un saldo trágico de 14 personas fallecidas, 27 heridas y siete desaparecidas, según informó este lunes la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR).

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El último reporte de la SNGR detalló que la mayor parte de las víctimas se registraron en un alud que devastó una zona cercana a la ciudad turística de Baños de Agua Santa, en la provincia de Tungurahua. En este incidente, hasta el momento, se han confirmado doce muertos, nueve heridos y cuatro desaparecidos.

Las intensas lluvias también han cobrado vidas en otras provincias andinas. En Chimborazo se reportó una persona fallecida, y otra más en Cotopaxi. Ambas provincias forman parte de la zona andina central de Ecuador, que ha sido severamente afectada por los temporales.

Además de las víctimas humanas, las lluvias han causado significativos daños materiales. La SNGR ha registrado un total de 33 viviendas afectadas y diez destruidas. También se han reportado 1,54 kilómetros de vías dañadas, seis puentes destruidos y cuatro con afectaciones, además de daños en otros cuatro bienes públicos y un centro de salud.

En términos de población afectada, la Secretaría informó que 1.283 personas han sufrido las consecuencias de las lluvias en 35 cantones de 13 provincias del país. Las jurisdicciones más impactadas son las provincias andinas de Tungurahua y Chimborazo, así como las amazónicas de Morona Santiago y Napo.

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En los últimos cuatro días, los eventos naturales más recurrentes han sido deslizamientos de tierra, que representaron el 39,2 % del total de emergencias, seguidos por inundaciones (23 %) y aluviones (17,6 %).

Para atender a los damnificados, las autoridades han habilitado seis alojamientos temporales en las provincias amazónicas de Napo y Orellana, y en la provincia andina de Tungurahua.

Desde el pasado viernes, se ha declarado en emergencia a los municipios de Penipe, en Chimborazo, y Baños de Agua Santa, en Tungurahua, debido a la magnitud de los desastres.

Los pronósticos del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) prevén que las lluvias y chubascos continúen en la región andina, mientras que la región amazónica podría experimentar lluvias y tormentas dispersas, según indicó la SNGR en su informe más reciente.

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