Con ayuda de socorristas del Cuerpo de Bomberos, agentes policiales rescataron el cadáver que fue arrojado a un canal de riego, en el recinto La Esperanza, en el límite entre los cantones Jujan y Milagro, en la provincia del Guayas.

La víctima, de contextura gruesa, que vestía jean azul y botas negras, presentaba orificios de bala en el tórax. Tendría unos 40 años, estaba atada de pies y manos, y envuelta en un plástico negro.

Un guardia de una hacienda próxima y a cargo del cuidado de una bomba que succiona agua del canal de riego para los sembríos de caña, contó que a la una de la madrugada de este jueves 30 de junio de 2022 vio que un carro llegó hasta el exterior de su lugar de trabajo.

Por lo oscuro del sector no pudo divisar a las personas ni la placa del vehículo, una camioneta doble cabina, de la cual sacaron el bulto y lo arrojaron. “Avisamos a la policía y confirmaron que era un hombre muerto”, indicó el hombre, aún nervioso.

El jefe del Distrito Milagro, Álex López, confirmó que el sitio del hallazgo no es la escena principal del crimen y que cruzaban información con personal de Jujan. “Este sector pertenece a Jujan y ya estamos esperando al jefe de ese distrito para que pueda continuar con las pericias”.

El sitio del hallazgo está a veinte minutos del recinto Carrizal. La vía de segundo orden está en malas condiciones.

Aproximadamente a las once de la mañana de este jueves, el cuerpo fue llevado a la morgue del cantón Milagro para que algún familiar lo identifique.

María Culca y otros moradoras se mostraron preocupadas y comentaron que el robo de motocicletas es uno de los delitos con los que lidian.

“Ese señor no es de por aquí. Tampoco se ha sabido que alguien haya estado desaparecido”, manifestó preocupada la ama de casa.