“Hay personas que dicen: ‘eso es fácil, solo cojo un teléfono y lo grabo’. Cuando hay un equipo de profesionales inmenso detrás”, dice Carolina Romo, conocida como ‘La Tóxica’ en redes sociales. La ‘influencer’ con más de 120 millones de vistas en todos sus videos, se consolidó como una de las compatriotas mayor reconocidas en tan solo un año. ¿Cómo lo logró? ¡Te lo contamos!

Luego de obtener la licenciatura en comunicación social y de intentar entrar a varios medios televisivos, la quiteña, de 24 años, decidió apostarle a las redes sociales. Bastó un video para que el alcance de este llegara a los más de 50 millones de vistas en Facebook, el crecimiento exponencial de la creadora de contenidos la incentivó a continuar con los audiovisuales de entretenimiento.

“La aceptación de la gente fue muy rápida en las redes sociales, fue un boom en Colombia, México, Perú y Ecuador”, asegura. Para Romo su éxito estuvo cuando hizo ‘clic’ con su audiencia, quienes se sintieron identificados con varios de sus sketches en los que personifica a una novia celosa, de allí su sobrenombre: La Tóxica.

Aunque la aceptación de los usuarios de dichas plataformas es buena, ‘guayaca’ de corazón, al igual que otros influencers, ha sufrido diversas críticas malintencionadas. “Quiero educar a las personas para que entiendan que el bullying no está bien”, se sincera.

LAS REDES SOCIALES COMO UN TRABAJO

Además de lidiar con las críticas, la licenciada en comunicación social expresa que lo más complicado es luchar con grandes compañías que aún no reconocen un pago apropiado a cambio de divulgar su marca: “No valoran que esto es un trabajo como la publicidad que se vende en radio, televisión y prensa. No porque esté en Instagram o Facebook no vale, y sí lo vale porque es lo que la gente más consume porque tiene todo el día un teléfono en las manos”.

Para La Tóxica el tema de los creadores de contenido y redes sociales en cuestión de unos años serán visto como una carrera más en las Universidades, “para hacer publicidad en redes sociales se tiene que estudiar los algoritmos, qué implica ser un influencer, qué implica ser youtuber o tiktoker, porque no todo es igual”.

Romo pide que las personas “abran su mentes y entiendan que no es simplemente coger el celular, es una idea que tiene una producción, post-producción, edición y luego tienes que darle movimiento”.

Detrás del perfil de Carolina Romo hay 4 personas más el equipo de su network, quienes diariamente se encargan de ayudarle a grabar y popularizar sus videos. Entre el grupo está Bladroy, su pareja con el que tiene una relación de casi dos años.

METAS A FUTURO Y FAMILIA

Ante la pregunta de si es cierto que conoció a su ‘amorcito’ siendo un limpiaparabrisas, La Tóxica contesta que no. Todo fue grabado para una mini serie que publicó en sus redes sociales, pero lo que sí es real es el amor que se tienen. Hoy ya con su sexto mes de embarazo, la quiteña asegura que se mantiene enamorada y feliz en una relación sana que muy pronto escuchará campanas de boda.

“Los celos son solo para entretenimiento, siempre sabemos resolver las peleas”, dice. Romo considera a su novio una de las personas más importantes para llegar a los números que tiene hoy. Con él comparten el sueño de ser tan virales para que, en algún momento, sean nominados a un MTV Miaw o Eliot. Por el momento, está centrada en grabar videos hasta que su ‘pancita’ se lo permita.