Lograr internacionalizarse fue un trabajo propio y le llevó largas horas de estudio y constante preparación.

La artista Ana Paula Pérez no se amarga cuando le dicen que su éxito se debe a que es la hija de la presentadora Ana Buljubasich y del músico Nerio Pérez, pues sabe que las cosas no son así.

“Todo el tiempo pensé que me dirían eso. Siempre estuve consciente de que iba a arrancar la carrera con ese fantasma de ser la hija de Anita, pero es algo que me llena de orgullo”, dice la intérprete de ‘Me Llamas’.

Para ella, tener de progenitores a los conocidos argentinos no es un problema, pues desde niña le enseñaron a ganarse las cosas por cuenta propia y a no depender de otros para lograr cumplir los sueños.

“Tener a mis papás artistas fue el motor para que siga en la carrera. A veces me he desilusionado cuando las cosas parecen no salir bien, pero ellos están todo el tiempo recalcándome lo que he logrado y esos recordatorios hacen que siga”, agrega.

Pese a que los argentinos tienen experiencia en el mundo del espectáculo, Ana Paula dice que nunca movieron sus contactos para que ella logre algo, al contrario, la incentivaron a que si quería algo debía ser la mejor para conseguirlo.

“EL ARTE SE RESPETA”

Con 24 años, entre risas, recuerda que hace 5 inició en el mundo artístico y lo primero que le mencionaron sus papis fue que “el arte se respeta”. Dicha frase retumbó en los oídos y corazón de la ecuatoriana, tanto así que se le “arruga el corazón” cuando los actores son menospreciados y cuando comparan grabar un TikTok con una escena teatral.

“Se ha ‘manoseado’ la palabra artista. Uno piensa que ser tiktoker es ser actor y no es lo mismo, porque eso es desvalorizar el esfuerzo y estudios de uno”, argumenta.

También explicó que aquellas personas a las que se les ha brindado una oportunidad de ‘camellar’ en una producción no quiere decir que sean actrices, ya que para eso se necesitan estudios y saber cómo encarar la llamada ‘fama’, porque “debes saber aportar a la sociedad de alguna forma y no pensar que todo es rostro y cuerpo”.