Era periodista, abogado, comerciante y sobre todo padre de familia y hombre de bien. La muerte le llegó como cuando esos goles llegan en el momento que todos están pensando en el futuro. Esos goles que se cansó de narrar en su vida como comentarista deportivo.

Roberto Oña Nuñez se fue de este mundo a manos del equipo de los malos, los malos que le ganan la vida a los buenos, cada día en Guayaquil y nadie dice nada.

La noche del jueves 26 de noviembre del 2020, por robarle en su restaurante en Sauces 6 de Guayaquil y tratar de defenderse, recibió un disparo que le negó la posibilidad de seguir luchando por la vida con trabajo, entrega y pasión.

Tuvo 35 años en el periodismos deportivo, era narrador, muchos le decían "Pitazo Incial" debido que así se llamaba el programa que teñía con su hermano el Dr. Miltón Oña, luego llegó la profesión de abogado, y muchos lo llamaban así.

Pero en sus venas tenía la sangre de comerciante, lo de la comida siempre le atraída, primero fue el dueño de un bar de un colegio de Guayaquil, hasta que con esfuerzo se puso el negocio El Callejón en Suaces 6, se enamoró de las redes sociales y en su cuenta de Twitter, promocionaba la comida que vendía.

Combinaba las tres profesiones, narraba, la abogacía y el comercio.

Roberto era un luchador, un peleador de la vida, la vena del periodismo la sigue su hijo Roberto Oña Ortega que labora en Radio Diblu y que también es narrador y reportero.

"Mi pasión es el periodismo, es lo que me gusta, es lo que me encanta, pero tener mi negocio propio siempre fue mi sueño", nos dijo Oña, cuando los periodistas íbamos religiosamente el estadio, en especial al Monumental.

Oña en las pasadas eliminatorias al Mundial de Rusia 2018, fue uno de los que estuvo en el inicio cuando Ecuador le ganó a Argentina en Buenos Aires, fue uno de los días más emocionantes que vivió y expresó que esa alegría nunca olvidaría ganar en la tierra de Maradona, ahora los dos están en el cielo.

En los últimos minutos de su vida, el equipo de los malos le ganó, un disparó se llevó la voz de Roberto para siempre.